El Jardin De Los Narcisos

Alguna ocasión viajando, me hospede en un pequeño hotel de un pueblo, en el cual me resguarde ante la niebla que no me permitía ver el camino y amenazaba mi integridad –y no se si la de otros- oabran sido los designios de dios. Que yo conociera de sus maravillas y de ellas aprendiera a saber Amarte.

Era la hora del crepúsculo y la dueña del hotel me invito a que conociera el Jardín de losNarcisos a escasos kilómetros del lugar. El día era frío y lluvioso. Le explique que había decidido quedarme en el lugar por las condiciones del clima y que no pensaba manejar por lo ya expuesto.Sonrío calmadamente y dijo. “caminemos”

¿En estas condiciones?, replique.

-Ella insistió-, Por favor, Si no lo hace nunca se perdonara haberse perdido de esta experiencia. – Si no hubiere ido,tampoco habría sabido de lo que me perdería- y no me culparía de nada. Así que tome la decisión de ir.

Despues de caminar durante 20 minutos entre la lluvia –es un algo que me prometiste, caminar y gozarla lluvia juntos, me dijiste que te fascinaría que sucediera en la playa. Pondre lo mejor de mi para que ese tu sueño se realice, que a fin de cuentas yo sere el que realizo su sueño. Darte lo que tuquiereas y compartir la lluvia contigo- y niebla, doblamos a un angosto camino de grava y vimos la cupula de un pequeño templo. Al otro lado del templo, vi un pequeño letrero con una flecha, hecho amano que decia: “Jardin de los narcisos” Yo segui a mi guia por el sendero. -que hermosos son los senderos, siempre llenos de sorpresas- Entonces quede bocaabierto. Delante de mi estaba la vistamas gloriosa. –Algo comparado solamente con tu belleza-

Parecia como si alguien hubiera tomado una enorme tina de oro y la hubiera derramado sobre la cumbre del monte a sus laderas. Las floresestaban plantadas en majestuosos diseños arremolinados, grandesfajkas y tiras de un amarillo como el oro, de un anaranjado intenso, de un blanco cremoso, de un amarillo cetrino, de un salmon rosado...