El lavatorio de los pies.

 “EL LAVATORIO DE PIES”
Para ahondar en esta misericordia e ir reflexionando, tomamos el texto de San Juan: “ El lavatorio de pies “ Jn 13, 3-17, para ver el servicio como apoyo, como humildad y a veces como apertura, ¿porque nos manda Jesús a lavarnos los pies unos a otros? ¿ Que nos querrá decir con esto el Señor?
Dice San Ignacio, que conviene, “recordar la historia personal de tiempo entiempo, de años en años, de edad en edad, donde he estado, la casa donde he habitado, la infancia, a quien hemos amado, quien nos amó. De tiempo en tiempo, de edad en edad.”
Y poner en el corazón misericordioso de Dios toda nuestra vida, lo que recordemos, lo que nos pesa, lo que no nos deja ser libres.
Tomamos entonces este pasaje, en medio de la Cena, la Última, donde no faltó la discusiónentre los discípulos, porque cada uno se sintió más importante que sus hermanos. Jesús comía en silencio, estaba como concentrado en sus pensamientos pero no pudo dejar de atender la discusión que se daba en alta voz; entre ellos, hubo un altercado, dice San Lucas, Lc 22,24-27 “ y surgió una discusión, sobre quien debía ser considerado como el más grande. Jesús les dijo ; Los reyes de las nacionesdominan sobre ellas, y los que ejercen el poder sobre el pueblo se hacen llamar bienhechores, pero entre ustedes , no debe ser así, al contrario el que es más grande que se comporte como el menor y el que gobierna como un servidor. Yo estoy entre ustedes como el que sirve…” y ahora , los discípulos entendían menos todavía, ¿ que querría decir con estas palabras ? Jesús se puso de pie, los apóstoleslo miraban con asombro y entendían cada vez menos, vieron como tomaba la toalla, se la ataba a la cintura, que iba a hacer Jesús?
Dice San Juan : “ Antes de la fiesta de Pascua, sabiendo Jesús que había llegado la hora de salir de este mundo para ir al Padre, Él, que había amado a los suyos que quedaban en el mundo, los amó hasta el fin. Durante la cena, cuando el demonio ya había inspirado aJudas Iscariote ,el propósito de entregarlo, sabiendo Jesús que el Padre había puesto todo en sus manos y que Él había venido de Dios y volvía a Dios, se levantó de la mesa, se sacó el manto y tomando una toalla se la ató a la cintura. Luego echó agua en un recipiente y empezó a lavar los pies de los discípulos y a secárselos con la toalla que tenía en la cintura. Cuando se acercó a Simón Pedroéste le dijo: ¿Tú Señor me vas a lavar los pies a mi?’ Jesús le respondió: ‘No puedes comprender ahora lo que estoy haciendo, pero después lo comprenderás.’ No, le dijo Pedro, ¡tú jamás me lavarás los pies a mí !. Jesús le respondió: ‘Si yo no te lavo, no podrás compartir mi suerte’. Entonces, Señor, le dijo Simón Pedro, ‘¡ no solo los pies, sino las manos y la cabeza !’. Jesús le dijo : ‘el que seha bañado no necesita lavarse más que los pies, porqué está completamente limpio. Ustedes también están limpios aunque no todos’. Él sabía quién lo iba a entregar y por eso había dicho : ‘No todos ustedes están limpios’”.
Jesús se despoja, se saca el manto y va a hacer la tarea del esclavo; el despojo de Jesús es signo de humildad; Jesús se despoja, y yo debo despojarme también.
Toda conversión,todo servicio requiere, un despojo, un dejar algo; y hasta llegar a Pedro ninguno le había preguntado ni se había atrevido a oponerse a lo que hacía Jesús.
Pero Simón no era de los que se callaban, retiro los pies escandalizado, cómo lo iba a dejar hacer una tarea de esclavos, nunca lo permitiré. Tocando sus sandalias Jesús le dijo: “Lo que hago no lo entiendes ahora”, aún así Pedro retiró lospies, “Jamás me lavarás tú, los pies a mí,” era el Pedro fogoso, temperamental, apresurado, testarudo. apasionado, frontal. Y entonces Jesús endurece el tono de la voz, “sino te lavo los pies no tienes parte conmigo”, es como la última advertencia en que se juega su amistad con Jesús, y entonces le dice : “No solo los pies, sino también las manos y la cabeza”, Jesús tal vez sonríe, pero luego...