el loro y el puma
cuando se encontró con el águila. Tanta hambre tenía que
decidió comérselo. Pero el águila salióvolando hasta la
rama más alta, desde donde le dijo que no andaba con ganas
de pelear.
- Vea, compadre. El loro me acaba de curar el susto, y
quierodisfrutar de esta paz.
El puma tuvo que seguir. Anduvo, por los senderos que se
abrían entre lo verde, cuando vio a la serpiente. No era su
plato favorito, perola tripa le gritaba que le echara un
bocado. La serpiente estaba enrollada en una rama, y la cola
caía como una campana. Allí es donde quiso morder el puma, yla serpiente levantó la cola para ponerla fuera de su alcance.
- Mire, don puma. Quien sabe si en la pelea ganar usted o
gano yo. Pero el loro me acaba decurar un hechizo de amor,
y ando tan bien que prefiero dejarlo pasar. Para otra vez
vemos quien es más poderoso.
El puma ya estaba sin fuerzas como parasubirse al árbol, y
siguió su camino. No tardaría en aparecer la presa que
andaba necesitando. Fue así hasta que llegó al manantial,
donde el loro estababebiendo.
Se agazapó para echársele encima, pero sintió que alguien lo
tocaba en el hombro. Pocos animales se animaban a hacerlo.
Pero esta vez fue la serpientecon la punta de su cola,
colgando desde una rama. A su lado estaba el águila.
- Vea, don puma, - le dijeron. – Ese loro es un animal muy
sabio, déjelo enpaz.
El puma miró hacia el loro, meneó la cabeza, y siguió de
largo. Algo mejor iba a encontrar, pensó, la sabiduría no es
lo que anda sobrando.
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