El maestro comino

EL MAESTRO DE “COMINO”
Germán Alexánder Molina Soler

A... MABEL BETANCOURTH:
“Una experiencia significativa en la
formación de lectores...”
mmmmmm

Hace algunos días, observando a Juan David, mi sobrino de tres años y medio, cuando nos llamaba la atención para “leernos” las vallas de “Optimo”, “Chocolatinas Jet”, “Postobón” o “Coca cola”, reflexionaba sobre sucapacidad para recordar el símbolo total de cada anuncio y su fluidez verbal al pronunciar los textos completos y “de corrido”. Y pensaba, entonces, qué iría a pasarle cuando llegara a cursar su primer grado y, por esa casualidad del destino, le correspondiera en suerte una maestra o un maestro que lo iniciara en la lectura con las dichosas combinaciones fonéticas, las palabras partidas y lasfrases sin sentido.

Desde ese día, la idea ha venido trabajándome, inquietando mi “inquietud pedagógica” e incitando mi deseo de saber, cada vez más, sobre el apasionante tema de la lectura. Y llega a mi recuerdo “Comino” - un amigo de mi infancia -, a quien aún le envidio su libertad de esa época, su conocimiento palmo a palmo del país y su facilidad para convencer con la palabra hablada.“Comino” tenía doce años cuando lo conocí - una mañana de domingo -, en el Parque Gaitán, “adivinando” colores, fechas y formas requeridos - (de manera amañada) - por su padre, y relacionados con un tumulto de despreocupados y desocupados vecinos de Ibagué, reunidos alrededor de “Margarita” - una culebra cascabel -; de la que aún me pregunto si era cierto que le habían extraído todo el veneno,haciéndola morder un pañuelo.

“Comino” poseía la prodigiosa capacidad de entretener por más de una hora, con su “charlatanería”, a cuanto paisano o grupo de paisanos se le pusiera enfrente. Todavía quiero saber de dónde sacaba tanta palabra, tantas ideas, tanto cuento, si no sabía leer ni escribir.

Amagaba que leía la prensa -(sobretodo las páginas deportivas) - y los cuentos de Condorito eintentaba convencernos con su cara de asombro, su gesto de disgusto, su fruncimiento de ceño y su sonora carcajada... Peleaba contra las noticias. ! Como si las comprendiera! Reclamaba contra los accidentes, las alzas y los abusos de poder. ! ¡Como si los comprendiera ! Se vanagloriaba de los triunfos deportivos colombianos y se humillaba en las derrotas. !!! Como si los comprendiera !!!“Comino” tenía la gracia y la “chispa” suficiente para vivir cada lectura. Tanto... que era necesario ser muy su amigo, muy su “llave”, para darse cuenta de que no sabia leer ni escribir.

Había iniciado cuatro primeros. Ninguno terminó. Sus maestras jamás entendieron que cada año “Comino” sabía más palabras, alargaba más sus cuentos y conocía más símbolos de la vida. Y que éso lo desalentaba para“leer” sílabas o repetir nombres de letras o pronunciar frases sin sentido.

“Comino” iba de escuela en escuela... de maestra en maestra... de pueblo en pueblo... Siguiendo la romería de su “apá”, de su ”viejo”, de su “cucho”. Como buen “culebrero” - serpentólogo, mejor -, el papá de “Comino” había vivido en el Llano, en el Casanare, en Bogotá. Conocía Tunja... Medellín... Armenia...Ibagué... Neiva... Manizales... Bucaramanga..... e intermedios ... (recorridos “con plata” y “sin plata”).

...Cada plaza y cada parque aún tienen guardado, en su eco, las palabras que vendían ilusiones, sueños y utopías contra la mala suerte, el desempleo y el desamor...

...De cada corrillo, siempre aparecían los incautos con el oído presto y el corazón abierto para conocer “su futuro”,reconocer a sus “enemigos”, enterarse de las artimañas para “atraer el dinero” y aprender las oraciones que devuelven las riquezas y los enamorados...

Y aquí está lo que hoy me impresiona. A los doce años, “Comino” no sabía leer ni escribir. Las vocales y las consonantes se le confundían al querer reconocerlas en un escrito o al desear ponerlas en un papel. Sin embargo, jamás se equivocaba al...