el maiz transgenico
El monopolio más marcado de la historia del industrialismo lo tiene la empresa Monsanto con las semillas transgénicas. Según sus propios datos,esta trasnacional estadounidense controla más de 80 por ciento del rubro, porcentaje ampliamente mayor que el que detenta cualquier otra empresa en su campo, sea petrolera, química o informática.Monsanto avanza además hacia el control de todas las semillas, no sólo transgénicas. Para ello ha comprado empresas semilleras en todo el mundo, con el fin de controlar un sector que aunque modesto envolumen de dinero -comparado con otras industrias-, es absolutamente imprescindible: es la llave de toda la cadena alimentaria.
Una vez que controle la mayoría de las semillas convencionales (notransgénicas), lo único que necesitará hacer es dejar de producirlas, y a través de una política de hechos consumados -al no existir alternativas en el mercado y a la vez con las escasas empresas que quedenen el rubro- estará en condiciones de obligar a todos a sembrar sus transgénicos.
A unos, porque no tendrán otra opción y a otros -los campesinos que plantan sus propias semillas- a punta decontaminación, juicios y las semillas suicidas, llamadas "Terminator"
Monitoreo del Grupo ETC
Según el monitoreo de la industria que hace el Grupo ETC (antes con el nombre de RAFI), a principios de ladécada de 1980 existían en el mundo más de 7 mil empresas semilleras que producían semillas para el mercado comercial. Ninguna llegaba a uno por ciento del mercado.
Hace algo más de una década, lasempresas que producían agrotóxicos -como Monsanto, Dow, Bayer, Dupont y otras- comenzaron a comprar intensivamente a las semilleras. De esta forma promovieron la venta de semillas y agrotóxicos de lacompañía en paquete. El resultado más visible de este casamiento de conveniencia fueron los transgénicos: más de dos tercios de los transgénicos plantados son cultivos resistentes a agrotóxicos.
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