El Malandro y su fantasmas
Noche en Caracas, las calles están poco habitadas, sus pocos peatones caminan con paso acelerado para ir a su casa, acelerados por el miedo a que los roben, o peor, los asesinen.
Ese miedo andaba por esas calles, dando vueltas con su moto estaba Pedro Montero, un malandro cuya vida se basaba en robar y matar gente. Vio a su primera víctima, el pobreRoberto, un hombre de familia de 40 años, no tiene ni idea de cómo terminará su noche, la moto se le empieza a acercar, y sin miedo, habla Pedro
Pedro (Acento de “malandro”): Epa chamo. ¿Qué hora es menor?
Roberto se detiene, aliviado de que su suerte le sonríe y no lo atracarán, saca su reloj y responde:
Son las nueve y cuarenta y tres de la noche hermano.
Pedro saca su pistola y le apunta a laRoberto, mientras le dice, con su acento: Pues es hora de UN QUIETO, quiero es todo. ¿Oyó? El dinero, teléfono, reloj, TODO.
Roberto, con miedo, le da sus pertenencias, al darle el teléfono, este dice: Pana, no tengo más que este teléfono y el dinero que me sobró del pasaje, además del reloj.
El malandro, molesto, le dice: Bueno chamo, eso no es problema mío.
Mientras dijo esas últimas palabrasdesenfundó su arma de su bolso de mano y le disparó en el pecho. La noche era joven, y Pedro tenía más y más codicia, tanto de robar como de matar. Siguió manejando su moto, cuando recibe una llamada de su madre, que preocupada dice: Pedro José Montero. Dígame dónde está, mire que es muy tarde y a esta hora sale el hampa.
Con aires de tranquilidad, Pedro responde: No se preocupes señora que yo loque estoy es chambeando pa´ salir de este cochino barrio lleno de maldad. Vamos a salir pa´ adelante, pronto tendremos una casa en vez de vivir en este rancho.
Su madre, con menos preocupación le dice: Bueno hijo, me alegro que seas tan considerado por tu familia, pero ya casi no vienes a la casa, ese trabajo en la oficina te debe tener muy ocupado.
Enseguida responde: No se preocupe mujer, queyo estoy pa´ chambear y pa´ más nada. Ya tengo que colgar. Buenas noches.
Ella dice, antes de que corte: Dios me lo bendiga hijo.
Siguió manejando, no había carros en la calle a causa de la hora, pero eso no evita que el joven Pedro haga sus fechorías. Pasa por una parada de una camioneta, y ve a un hombre viejo con una camisa blanca, aspecto fantasmal, y una cara familiar, antes de poderreconocerlo desaparece. Sigue manejando y Llega a una esquina cerca de un barrio, en el cual ve pasando a una mujer. Pedro le pega el arma en su espalda y dice: Esto es un atraco, quieta ahí chamita.
La mujer se llamaba María, ella en su vida la habían atracado, tenía solo 17 años, y como recordó haber visto a un latero, empezó a gritar: Auxilio, por favor ayúdenme.
Sin pensarlo 2 veces, Pedro ledescargó un balazo en el pecho y se llevó sus pertenencias. Se decía a sí mismo: Igual la iba a plomear, yo soy es la mente de este barrio y nadie anda por ahí a esta hora sin mi permiso.
Recargó su arma y empezó a prepararse para ir a su rancho a ver a su madre, la única persona que nunca le había fallado en su vida. Antes de montarse en su moto, escuchó unos pasos rápidos, y en menos de unossegundos ya vio al latero ya mencionado antes. Pedro exclamó mientras reía: Ay chamo, me salió dos por uno en este atraco, a este lo voy a reventar por tirársela de héroe
Su nombre era Alexander, pero ya nadie lo conocía por ése nombre, tiene muchos nombres. “El loco ése”, “El recogelatas del barrio”. Al ver el cadáver se sorprendió, y le dijo al hombre con una voz amenazante: CHAMO. ¿TU ERES LOCO?TE LA TIRAS DE MUCHO PORQUE ERES MALANDRO Y TIENES TU BICHA, ASESINO.
Antes de sacar su arma le dijo: No te comas la luz conmigo que vas a terminar como ella, pero a la chama al menos la van a llorar, a ti nadie te llorará.
La conversa siguió, Alex respondió con certeza en su mirada: Es que tú eres el bicho aquí, a ti te gusta matar gente verdad. ¿Te gusta lo que ves cada vez que llegas a...
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