El Matadero
Los personajes son descritos en dos grupos opuestos: unitarios y federales. Los militantes del partido federal, cuyocaudillo era Rosas, son representados como personas crueles y brutales, bárbaros y brutos, estableciéndose analogía entre los personajes federales y animales como buitres, lobos y tigres, con gusto por la sangre, actitud depredadora y dominación por el terror y la violencia. En cambio, los unitarios, con los que se identifica el narrador, son presentados como personas cultas y amantes de las luces,civilizados. Se establece una comparación entre la figura del toro, que resiste hasta el final, y el joven unitario que revienta de rabia antes de ser humillado.
Echeverría también describe a otras figuras sociales de la época, como los gringos y la plebe. A los extranjeros los suele describir con burla, lo que deja entrever algo de desprecio por parte del autor. Al pueblo lo describe como inculto yhambriento. Los personajes de la plebe, como las negras achureras y los muchachos que se entrenan en el manejo del cuchillo, son descritos como seres vulgares y fácilmente manipulables, de manera que se conformen fácilmente con los designios del Restaurador o los mandatos de la iglesia, y olvidan rápidamente los hechos, como sucedió con el muchacho degollado.
del infierno que un hombre blancopelirrubio. Más adelante al grito de ¡al toro, al toro! cuatro negras achuradoras que se retiraban con su presa se zambulleron en la zanja llena de agua, único refugio que les quedaba.
El animal, entretanto, después de haber corrido unas veinte cuadras en distintas direcciones azorando con su presencia a todo viviente, se metió por la tranquera de una quinta donde halló su perdición. Aunquecansado, manifestaba bríos y colérico ceño; pero rodeábalo una zanja profunda y un tupido cerco de pitas, y no había escape. Juntáronse luego sus perseguidores que se hallaban desbandados y resolvieron llevarlo en un señuelo de bueyes para que expiase su atentado en el lugar mismo donde lo había cometido.
Una hora después de su fuga el toro estaba otra vez en el Matadero donde la poca chusma quehabía quedado no hablaba sino de sus fechorías. La aventura del gringo en el pantano excitaba principalmente la risa y el sarcasmo. Del niño degollado por el lazo no quedaba sino un charco de sangre: su cadáver estaba en el cementerio.
Enlazaron muy luego por las astas al animal que brincaba haciendo hincapié y lanzando roncos bramidos. Echáronle, uno, dos, tres piales; pero infructuosos: al cuartoquedó prendido en una pata: su brío y su furia redoblaron; su lengua estirándose convulsiva arrojaba espuma, su nariz humo, sus ojos miradas encendidas.
-¡Desjarreten ese animal! -exclamó una voz imperiosa. Matasiete se tiró al punto del caballo, cortóle el garrón de una cuchillada y gambeteando en torno de él con su enorme daga en mano, se la hundió al cabo hasta el puño en la gargantamostrándola en seguida humeante y roja a los espectadores. Brotó un torrente de la herida, exhaló algunos bramidos roncos, vaciló y cayó el soberbio animal entre los gritos de la chusma que proclamaba a Matasiete vencedor y le adjudicaba en premio el matambre. Matasiete extendió, como orgulloso, por segunda vez el brazo y el cuchillo ensangrentado y se agachó a desollarlo con otros compañeros.
Faltabaque resolver la duda sobre los órganos genitales del muerto, clasificado provisoriamente de toro por su indomable fiereza; pero estaban todos tan fatigados de la larga tarea que la echaron por lo pronto en olvido. Mas de repente una voz ruda exclamó:
-¡Aquí están los huevos! -Y sacando de la barriga del animal y mostrándolos a los espectadores, dos enormes testículos, signo inequívoco de su...
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