El matrimonio según la Doctrina Social de la Iglesia y la Vulneración al interés superior del niño gracias a las leyes de Genero y de Matrimonios Igualitarios

El matrimonio según la Doctrina Social de la Iglesia y la Vulneración al interés superior del niño gracias a las leyes de Genero y de Matrimonios Igualitarios:
Introducción: El presente trabajo tiene como objetivo dejar de manifiesto cual es el verdadero sentido del matrimonio, y como el mismo se puede llegar a deformar gracias a las leyes de genero y de matrimonios igualitarios y elconflicto que los mismos traen a la institución de la familia, a los hijos y a la sociedad en general, haciendo hincapié en como las mismas leyes vulneran a la propia Constitución Nacional y a parte del ordenamiento jurídico positivo de nuestro país.
En el presente trabajo también se dejará de manifiesto como estás leyes de genero y de matrimonios igualitarios atentan contra la misma naturaleza del serhumano y por ende van en contra del Derecho Natural.
Fundamentos y fines del matrimonio: La familia tiene su fundamento en el matrimonio, el fundamento de la familia es el matrimonio y Santo Tomás define en la suma teológica el matrimonio diciendo que es "la unión entre un hombre y una mujer para siempre ante Dios, en la que el primero se encarga de la manutención y la segunda del cuidado delhogar”. ¿Por qué un hombre y una mujer? Porque de los “trabajos que son necesarios para la vida humana unos son para los hombres, otros para las mujeres” [1]. La primera parte de la definición de Santo Tomás es la visión natural de la unión matrimonial. Cuando en el Génesis Dios dice que los creó varón y mujer y cuando el hombre ve a la mujer, dice es hueso de mis huesos, carne de mi carne y seránuna sola carne dice el Génesis. Aquí se habla de la unidad, de la permanencia, de la indisolubilidad y también les dice: y serán fecundos" es decir que el fin fundamental del matrimonio es ese amor mutuo que se tienen los esposos con el que donan una nueva vida; se transmite y se proyecta en una nueva vida que son los hijos. El hombre tiene en su misma naturaleza el instinto de perpetuar laespecie a la que pertenece [2]. Y ese es el fundamento natural del matrimonio. No puede haber perpetuidad en la especie si no hay matrimonio.
El matrimonio no es sólo una unión para la fecundación, como por ejemplo en los animales que tienen crías y luego se separan. En el matrimonio ese hijo, como es el ser más indefenso que hay, necesita mucho tiempo para lograr su desarrollo físico y espiritual,para lograr ese fin necesita de ambos padres y aparte el hijo es el fruto del amor entre los esposos. Lo que en él está unido, debe permanecer unido. Si yo soy el fruto del amor de mis padres, soy la unidad de ese amor. Soy el fruto de ese amor. Entonces mis padres tienen que seguir por mi, porque necesito educación, necesito de su consejo, de su formación, cuando soy más niño necesito hasta queme alimenten. Por lo tanto ese es el fundamento natural del matrimonio. Muchas veces los psicólogos han determinado que la crisis de muchos hijos es que lo que en ellos está unido, afuera está separado. Y cuando esa separación es conflictiva, es cuando hace más daño a los hijos. Por eso uno lo primero que tiene que hacer es pensar bien y saber que las elecciones de vida son para toda la vida ytienen una repercusión en otros seres. Hoy es muy común decir: " déjenme yo soy dueño de mi vida, yo soy dueño de hacer de mi vida lo que quiero. Para poner un ejemplo de este absolutismo egoísta que se ve hoy en día, se puede mencionar el caso de los niños que nacen con SIDA, porque sus padres han elegido hacer de su vida lo que ellos querían ¿y qué culpa tiene este niño?. Entonces nos fijemos, quetodo acto que yo haga no sólo tiene una repercusión en mi, sino que tiene una repercusión en los que me rodean. Entonces yo no puedo ser dueño de mi vida y hacer lo que yo quiera porque afecto no sólo a mí mismo, sino que afecto a todo el que me rodea y depende de mí.
Santo Tomás dice que el matrimonio es uno con una para siempre ante Dios. Cuando dice ante Dios, eleva esa unión natural a un...