El Mundo De Franco 1950

El séptimo gobierno de Franco: 1951-1956
Esta década se inició con la derogación de la resolución de la Organización de las Naciones Unidas que establecía el aislamiento internacional de España, hecho presentado por el régimen como un triunfo, al haberse producido sin contrapartidas políticas. Con este motivo, tanto el sector militar del régimen como el católico, dirigidos respectivamente porLuis Carrero Blanco y Alberto Martín Artajo, propusieron la continuación de las reformas para conseguir la plena integración internacional; cada uno de ellos proponía el reforzamiento de la presencia internacional de su respectivo sector; pero ambos coincidían en la necesidad de reducir la presencia falangista.
En esta situación, se produjo en los primeros meses de 1951 el boicot a los tranvíasde Barcelona, motivado por una subida de la tarifa del 40%, y por el hecho de que el gobierno no anulase su aplicación, como había hecho en Madrid respecto a una subida similar. El boicot, convocado espontáneamente mediante octavillas copiadas a mano, tuvo un gran éxito, reflejo del gran malestar provocado por la situación crónica de problemas de abastecimiento y energía que afectaban a la vidacotidiana y a la actividad productiva. Diferentes órganos del Estado y el partido venían llamando la atención sobre este malestar. La subida debió ser anulada, siendo ésta la primera derrota del franquismo. Inmediatamente, este triunfo popular se explotó mediante una huelga general convocada en Barcelona por los enlaces sindicales, en la que participaron varios cientos de miles de trabajadores yque tuvo una gran repercusión internacional. A partir de este momento, el movimiento obrero se fue organizando, y se convocaron huelgas similares a la barcelona en otras ciudades, incluida Madrid. El gobierno fue consciente de que el malestar iba encontrando su forma de expresión. Carrero Blanco, en 1951, insistió en los cambios gubernamentales propuestos en 1950 para limitar la influenciafalangista; pero ahora añadió que, dado que se estaban normalizando las relaciones diplomáticas, ya no era posible responsabilizar a la presión exterior de la miseria económica; no obstante, Carrero seguía defendiendo igualmente las medidas represivas contundentes contra la agitación social.
En este contexto, Franco constituyó su sétimo gobierno, que una vez más mantuvo el equilibrio entre los distintossectores del régimen, principalmente falangistas, nacionalcatólicos y militares. Sin embargo, se reforzó la función presidencial, mediante la transformación de la subsecretaría de la Presidencia, ejercida por Carrero, en ministerio. Él y Franco dirigirían personalmente los dos asuntos más importantes de este gobierno: los acuerdos con Estados Unidos y el papado; por ello, Martín Artajo perdióinfluencia, aunque continuó en Asuntos Exteriores. Las funciones de control de información también adquirieron rango ministerial, al constituirse el Ministerio de Información y Turismo, dirigido por un falangista, grupo que también conservó a Girón de Velasco en Trabajo. Las organizaciones católicas mantuvieron el Ministerio de Educación, ahora a través de Joaquín Ruiz-Giménez, que sería uno de losmiembros más influyentes de este gobierno.
Además de la integración en occidente, este gobierno tenía la misión de asegurar el desarrollo económico, fomentando la industria y el comercio (especialmente el exterior, ya que en el interior la capacidad de consumo era aún muy limitada). Para ello, se designaron técnicos y personas con relaciones en las potencias internacionales para los ministeriosde Industria y Comercio; el objetivo era sustituir la política proteccionista del período autárquico por un modesto liberalismo económico; no obstante, se mantendría la potente intervención del Estado en la orientación de la producción a través del Instituto Nacional de Industria.

El Concordato con el Vaticano: agosto de 1953
Al producirse la resolución de la ONU de 1950 que facilitaba la...