El mundo del TC

Del EL MUNDO DEL TC
Del EL MUNDO DEL TC

Hoy estamos acá, en el mundo del TC, mientras permanecen dormidos los poderosos bólidos. Y de pronto, despiertan rugientes los potentes impulsores transformándolo en un mundo ruidoso, de aceleraciones y rebajes, de frenajes, zorpazos, trompos. Se estremece el pavimento !!! Se escuchan ecos en los campos y se espantan los teros cuando "nuestros gauchosdel TC" pisan los fierros a fondo. Truenan los motores y los ases del volante se transforman en adrenalina pura, en riesgosa acción vertiginosa. Apenas se puede oír. ¡¡¡ hay gorro, bandera, vincha !!! Mientras el relator de la radio trata de encontrar las palabras para describir la emoción de tan fragorosa lucha, el fuego de los escapes parece querer colaborar con las brasas para el asadito delhincha que grita ferviente hasta quedar sin voz del otro lado del alambre, quedando confirmado por siempre que en el TC, hincha, piloto y máquina son una sola cosa.
Del EL MUNDO DEL TC

Hoy estamos acá, en el mundo del TC, mientras permanecen dormidos los poderosos bólidos. Y de pronto, despiertan rugientes los potentes impulsores transformándolo en un mundo ruidoso, de aceleraciones y rebajes, defrenajes, zorpazos, trompos. Se estremece el pavimento !!! Se escuchan ecos en los campos y se espantan los teros cuando "nuestros gauchos del TC" pisan los fierros a fondo. Truenan los motores y los ases del volante se transforman en adrenalina pura, en riesgosa acción vertiginosa. Apenas se puede oír. ¡¡¡ hay gorro, bandera, vincha !!! Mientras el relator de la radio trata de encontrar laspalabras para describir la emoción de tan fragorosa lucha, el fuego de los escapes parece querer colaborar con las brasas para el asadito del hincha que grita ferviente hasta quedar sin voz del otro lado del alambre, quedando confirmado por siempre que en el TC, hincha, piloto y máquina son una sola cosa.
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Hoy estamos acá, en el mundo del TC, mientras permanecen dormidos lospoderosos bólidos. Y de pronto, despiertan rugientes los potentes impulsores transformándolo en un mundo ruidoso, de aceleraciones y rebajes, de frenajes, zorpazos, trompos. Se estremece el pavimento !!! Se escuchan ecos en los campos y se espantan los teros cuando "nuestros gauchos del TC" pisan los fierros a fondo. Truenan los motores y los ases del volante se transforman en adrenalina pura, enriesgosa acción vertiginosa. Apenas se puede oír. ¡¡¡ hay gorro, bandera, vincha !!! Mientras el relator de la radio trata de encontrar las palabras para describir la emoción de tan fragorosa lucha, el fuego de los escapes parece querer colaborar con las brasas para el asadito del hincha que grita ferviente hasta quedar sin voz del otro lado del alambre, quedando confirmado por siempre que en el TC,hincha, piloto y máquina son una sola cosa.
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Hoy estamos acá, en el mundo del TC, mientras permanecen dormidos los poderosos bólidos. Y de pronto, despiertan rugientes los potentes impulsores transformándolo en un mundo ruidoso, de aceleraciones y rebajes, de frenajes, zorpazos, trompos. Se estremece el pavimento !!! Se escuchan ecos en los campos y se espantan los teroscuando "nuestros gauchos del TC" pisan los fierros a fondo. Truenan los motores y los ases del volante se transforman en adrenalina pura, en riesgosa acción vertiginosa. Apenas se puede oír. ¡¡¡ hay gorro, bandera, vincha !!! Mientras el relator de la radio trata de encontrar las palabras para describir la emoción de tan fragorosa lucha, el fuego de los escapes parece querer colaborar con las brasaspara el asadito del hincha que grita ferviente hasta quedar sin voz del otro lado del alambre, quedando confirmado por siempre que en el TC, hincha, piloto y máquina son una sola cosa.
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Hoy estamos acá, en el mundo del TC, mientras permanecen dormidos los poderosos bólidos. Y de pronto, despiertan rugientes los potentes impulsores transformándolo en un mundo ruidoso, de...