EL ODIO A LA INFANCIA
Voy a lanzar una hipótesis temeraria. La nuestra es una sociedad que odia a la infancia y no es difícil de corroborar. Esta es una sociedad que no soporta que los niñosjueguen, brinquen, cuestionen, se insubordinen. Amamos controlarlos. No vemos la hora en que crezcan. Hacemos todo lo posible para que se parezcan a los grandes, hasta reinados. Los vemos como propiedades,como cosas, incapaces, como menos que humanos.
En el hablar cotidiano están instaladas las frases de oro de esta sociedad que abusa de la infancia: “a mí me gustan los niños, pero ajenos”, “no mepegue que usted no es mi papa”, “le voy a dar duro para que llore por algo”, “todo niño llega con su pan bajo el brazo”, “si se embaraza, se le daña la vida”. Hasta decir “infantil” puede ser un insultopara algunos. Incluso nos atrevemos a decir a voz en cuello que los niños son importantes porque son el futuro, ese lugar inexistente, del que nada sabemos.
Esto no es nuevo. Solo hasta hace un parde siglos, los niños y niñas fueron dignos de atención y se superó la noción de “despilfarro necesario”, que en la literatura especializada se entiende como la idea de tener muchos hijos para quealgunos lleguen a la vida adulta.
Sólo hace 70 años se habla de los derechos del niño a nivel mundial y hace 26 años se cuenta con instrumentos jurídicos vinculantes para los países. La Infancia es talvez el grupo poblacional con mayores desarrollos jurídicos internacionales y no es gratuito, a pesar de todo (o aún con todo esto), los niños y las niñas aún siguen siendo los más vulnerados.
Queremosa nuestros hijos o a los niños que nos rodean, pero como grupo social a penas los reconocemos. No es gratuito entonces que cada tres días sea asesinado un niño en Colombia, y eso es solo un dato: comodecía Stalin “Una única muerte es una tragedia, un millón de muertes es una estadística”. No nos aterran los 138 niños que se suicidaron entre enero y noviembre de 2014, los 15.111 que fueron...
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