el orden del discurso

Páginas: 54 (13482 palabras) Publicado: 20 de marzo de 2013
El Orden del Discurso
Michel Foucault

http://www.librodot.com

OBRA COLABORACIÓN DE USUARIO
Esta obra fue enviada como donación por un usuario.
Las obras recibidas como donativo son publicadas como el usuario las envía,
confiando en que la obra enviada está completa y corregida debidamente por
quien realiza la contribución.

El Orden del Discurso
Lección inaugural pronunciada en elCollage de France el 2 de diciembre de 1.970.
En el discurso que hoy debo pronunciar, y en todos aquellos que, quizá durante años, habré de
pronunciar aquí, habría preferido poder deslizarme subrepticiamente. Más que tomar la palabra,
habría preferido verme envuelto por ella y transportado más allá de todo posible inicio. Me habría
gustado darme cuenta de que en el momento de ponerme a hablarya me precedía una voz sin
nombre desde hacía mucho tiempo: me habría bastado entonces encadenar, proseguir la frase,
introducirme sin ser advertido en sus intersticios, como si ella me hubiera hecho señas
quedándose, un momento, interrumpida. No habría habido por tanto inicio; y en lugar de ser
aquel de quien procede el discurso, yo sería más bien una pequeña laguna en el azar de sudesarrollo, el punto de su posible desaparición.
Me habría gustado que hubiese detrás de mí con la palabra tomada hace tiempo, repitiendo de
antemano todo cuanto voy a decir, una voz que hablase así: «Hay que continuar, no puedo
continuar, hay que decir palabras mientras las haya, hay que decirlas hasta que me encuentren,
hasta el momento en que me digan –extraña pena, extraña falta– hay quecontinuar, quizás, está
ya hecho, quizá ya me han dicho, quizá, me han llevado hasta el umbral de mi historia, ante la
puerta que se abre ante mi historia; me extrañaría si se abriera».
Pienso que en mucha gente existe un deseo semejante de no tener que empezar, un deseo
semejante de encontrarse, ya desde el comienzo del juego, al otro lado del discurso, sin haber
tenido que considerar desde elexterior cuánto podía tener de singular, de temible, incluso quizá

de maléfico. A este deseo tan común, la institución responde de una manera irónica, dado que
hace los comienzos solemnes, los rodea de un círculo de atención y de silencio y les impone,
como si quisiera distinguirlos desde lejos, unas formas ritualizadas.
El deseo dice: «No querría tener que entrar en este orden azaroso deldiscurso; no querría tener
relación con cuanto hay en él de tajante y decisivo; querría que me rodeara como una
transparencia apacible, profunda, indefinidamente abierta, en la que otros respondieran a mi
espera, y de la que brotaran las verdades, una a una; yo no tendría más que dejarme arrastrar, en
él y por él, como algo abandonado, flotante y dichoso». Y la institución responde: «No hay por
quétener miedo de empezar; todos estamos aquí para mostrarte que el discurso está en el orden
de las leyes, que desde hace mucho tiempo se vela por su aparición; que se le ha preparado un
lugar que le honra pero que le desarma, y que, si consigue algún poder, es de nosotros y
únicamente de nosotros de quien lo obtiene».
Pero quizás esta institución y este deseo no son otra cosa que dos réplicasopuestas a una
inquietud: inquietud con respecto a lo que es el discurso en su realidad material de cosa
pronunciada o escrita; inquietud con respecto a esta existencia transitoria destinada sin duda a
desaparecer, pero según una duración que no nos pertenece, inquietud al sentir bajo esta
actividad, no obstante cotidiana y gris, poderes y peligros difíciles de imaginar; inquietud alsospechar la existencia de luchas, victorias, heridas, dominaciones, servidumbres, a través de
tantas palabras en las que el uso, desde hace tanto tiempo, ha reducido las asperezas.
Pero ¿qué hay de tan peligroso en el hecho de que la gente hable y de que sus discursos proliferen
indefinidamente? ¿En dónde está por tanto el peligro?
*
He aquí la hipótesis que querría proponer, esta tarde, con el...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • El orden del discurso
  • El Orden Del Discurso
  • El orden del discurso
  • el orden del discurso
  • Orden Discurso
  • El orden del discurso
  • El Orden Del Discurso
  • EL ORDEN DEL DISCURSO

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS