eL PEQUE O COTTOLENGO
L PEQUEÑO COTTOLENGO
Mientras en Europa hacía estragos la primera guerra mundial, la Divina Providencia dirigía por el camino de la caridad de Cristo los pasos del sacerdote Luis Orione, que por aquel entonces -con la bendición del Papa y de los Obispos- trabajaba con su humilde congregación en la educación cristiana y social de la juventud más pobre y necesitada.
Por el año 1915, moría lacondesa italiana Teresa Agazzini, dejando a Don Orione su casa para que hiciese en ella un asilo de caridad para ancianos pobres. A partir de esta casa, Don Orione inicia un nuevo campo de apostolado de caridad, para alivio de pobres y enfermos de toda clase, según el modelo de la gran obra de Turín, fundada por San José Benito Cottolengo.
Casi sin darse cuenta, Don Orione fue abriendo una tras otracasas de caridad, que la gente no tardó en llamarlas “Pequeños Cottolengos”, por identificarlas con la magnífica obra del santo. Así, los Pequeños Cottolengos se propagaron por toda Italia y por el extranjero, llegando incluso a nuestro país.
La Pequeña Obra de la Divina Providenciahoy está presente en más de treinta países. En palabras del mismo Don Orione, es “moderna en sus hombres y en susmétodos, toda y sólo consagrada al bien del pueblo y confiada en la Divina Providencia”.
En Argentina, con 75 años de vida y compromiso, la Obra Don Orione brinda atención integral a más de 1500 personas de diferentes edades con discapacidades múltiples, físicas y mentales de distinta gravedad, y en su mayoría carentes de grupo familiar.
Desde el 28 de abril de 1935, cuando fue colocada la piedrafundamental por Don Orione, en el Pequeño Cottolengo de Claypole se trabaja para mejorar la calidad de vida de los 450 niños, jóvenes y adultos que viven en 15 hogares, y reciben la atención de religiosos, profesionales, empleados y voluntarios.
En estos tiempos los desafíos que enfrenta nuestra organización son múltiples, y las necesidades cada vez mayores para seguir creciendo y sostener nuestramisión.
San Luis Orione nos alentaba a “marchar a la cabeza de los tiempos”, y hoy continuamos con este legado al proponer y recibir iniciativas que permitan mejorar la calidad de vida de nuestros hermanos.
El Fundador
Don Luis Orione fue un sacerdote todo de Dios y todo de los hombres. Dedicó su vida entera a amar y servir al Señor en los más humildes, en los más pobres y desposeídos. “Sólo lacaridad salvará al mundo” fue la convicción que marcó su vida; una caridad necesaria y urgente para “llenar los surcos que el odio y el egoísmo han abierto en la tierra”. Esta convicción lo llevó a fundar la Pequeña Obra de la Divina Providencia (1903), congregación que se extendió en su Italia natal y en tierras de misión, entre ellas Argentina. Don Orione visitó por primera vez nuestro país entre1921 y 1922, oportunidad en la que funda la comunidad orionita de Victoria (Buenos Aires).
En 1934 regresa a la Argentina y durante tres años desarrolla una incansable tarea apostólica, pastoral y social. En 1935 funda el Pequeño Cottolengo Argentino en Claypole y la sociedad ya reconoce en él al “Apóstol de la caridad”. La admiración y el afecto que su figura despierta se ve correspondida por elprofundo amor que Don Orione siente hacia nuestro país y su gente: “Ama Señor a la Argentina, porque la Argentina ama a tus pobres”. El amor recíproco entre Don Orione y el pueblo argentino se traduce en innumerables gestos de bondad y solidaridad que el mismo Don Orione y los suyos convierten en obras para los niños, los jóvenes y los más débiles de nuestra patria. El mensaje de Don Orione es unainvitación a mirar la realidad para transformarla con la caridad. Una caridad que se realiza no como paliativo asistencial, sino como promoción de justicia, de dignidad humana y de salvación integral del hombre y de la sociedad.
“Tenemos que ser santos, pero no tales que nuestra santidad pertenezca sólo al culto de los fieles o quede sólo en la Iglesia, sino que trascienda y proyecte sobre la...
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