El Perdón
la vida espiritual pertenece a un ámbito sobrenatural que el hombre por sus solas fuerzas no puede de ningún modo conseguir. Es el mundo de la gracia, del don divino, gratuitamente dado [gratis datum], que nos pone inmediatamente en comunicación con la Santísima Trinidad y su cielo.
El espíritu humano sin la gracia es, por tanto, un espíritu que, si bien animabiológicamente un cuerpo, está transido de muerte; esto es, carece de aquella vida sobrenatural para cuya recepción, desarrollo y plenitud ha sido predestinado por Dios todo ser humano.
La vida espiritual es, sin embargo, un hecho que hay que acoger con actitud sencilla, inocente, generosa (Mt 11,35), donde la bondad sustituya a la malicia, donde la claridad domine sobre la oscuridad, donde laverdad se imponga a la mentira, donde la justicia reine sobre la injusticia, donde todo esté, en fin, coronado por la hermosura del amor.
2.- Conocimiento general y sobrenatural de Dios
Dios es, para la vida espiritual, incuestionable, y sólo por una razón: no puede ser producto o resultado racional de argumentos o demostraciones “a modo de las ciencias naturales” [Catecismo de la Iglesia Católican.31]. Hemos de partir, por tanto, de Él: se nos da de manifiesto en nuestra conciencia y nuestro sentir (Rm 2,14), en la grandeza y hermosura de las criaturas (Rm 1,20), en la historia (Act 14,14-16). No hay resquicio en este mundo donde Dios no se nos haga, de algún modo, presente en virtud de que, siendo el Creador, deja su vestigio y sello en toda creatura. No es, sin embargo, suficienteeste conocimiento general de Dios. No nos conformamos sólo con esta magmática apreciación existencial o con una búsqueda emanada de nuestra propia industria: «Dios llama al hombre —afirma la Gaudium et spes, 21— a pensamientos más altos y a una búsqueda más humilde de la verdad».
¿Qué debe hacer el hombre para ser introducido al conocimiento de este orden sobrenatural? Sólo una cosa: “creer”. Elfundador de los Misioneros Identes, Fernando Rielo, siguiendo la tradición patrística de San Agustín y San Anselmo, denuncia el hecho con estas sabias palabras: «El “recto entender” requiere la base firme de la creencia o de la fe; si esto no fuera así, no sería posible ningún análisis, ningún conocimiento. Creer es empezar a entender». El acto de fe busca los medios para conseguir la gracia y sudesarrollo. Los principales son la oración y los sacramentos.
3.- Funciones de la fe
¿Por qué el ser humano tiene esta potestas fidei, esta energía interior que le capacita o le coloca en orden al conocimiento sobrenatural de Dios? La respuesta es, según el Catecismo de la Iglesia Católica, sencilla: «El hombre tiene esta capacidad porque ha sido creado “a imagen de Dios”(cf Gn 1,26)» [n. 36].Estas son las actitudes o manifestaciones de la fe en la marcha o ascensión del ser humano hacia Dios; esto es, en el desarrollo de su unión espiritual o mística con la Santísima Trinidad. Esta mística unión se inicia con la recepción de la gracia santificante en el bautismo, y, si ésta se hubiere perdido, se restaura, especialmente, con el sacramento de la penitencia.
En el siglo VI, el II Conciliode Orange declaraba que «Dios obra in nobis nobiscum “en nosotros con nosotros”» (Dz 182). Este obrar Dios “en nosotros con nosotros” se refracta en la complejidad de nuestra alma dando lugar a multiformes actitudes que podemos explicitar resumidas en un número simbólico de proposiciones: 1ª, Dios sale al encuentro de quien busca; por tanto, cuando el ser humano busca, Dios se acerca. 2ª, Diosse da a quien pide; por tanto, cuando el ser humano pide, Dios se da. 3ª, Dios abre a quien llama; por tanto, cuando el ser humano llama, Dios abre. 4ª, Dios perdona a quien perdona; por tanto, cuando el ser humano perdona, por Dios es perdonado. 5ª, Dios habla a quien escucha; por tanto, cuando el ser humano escucha, Dios habla. 6ª, Dios responde a quien pregunta; por tanto, cuando el ser humano...
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