El poder de la palabra

EL PODER DE LA NADA Y LA MAGIA DE LA PALABRA

En “Psicoterapia por el espíritu” Freud dice que el psicoanálisis es un tratamiento que actúa desde el alma, que tiene efecto sobre lo físico y anímico y cuyo instrumento es la palabra, a la que atribuye cierta cualidad mágica. Así dice “…y las palabras que usamos no son sino magia atenuada”
Resulta de interés indagar elalcance que pudo haber dado Freud a esta frase.
Un sendero para avanzar en ese sentido lo encontramos en una interesante especulación que hace sobre el origen de la concepción de alma y que desarrolla en “Tótem y Tabú”. Plantea que la idea primitiva de alma parte de concebir a una persona o cosa como doble; algo parecido a nuestro dualismo alma-cuerpo. La noción de alma tiene que haber surgido de laimpresión que provocaba el muerto y la remite a la dualidad presencia-ausencia. El doble carácter de lo existente surge del contraste entre estar presente a la percepción o ausentarse de la misma; percepción y recuerdo, que Freud extiende, aunque no las homologa, a la dualidad conciente-inconsciente .
Lo ausente a la percepción va mucho más allá de la huella que deja su imagen, se componeprincipalmente de un entramado de vivencias que perduran cuando la percepción se hace ausente; son memorias vivas de la ausencia. La perennidad de las vivencias le da un fundamento sólido a la creencia en la inmortalidad del alma. Así, las vivencias que deja un amor contrariado sobreviven al mismo y aún cuando el tiempo parezca haberlas borrado pueden, en determinado momento, volver a la vida resurgiendode la nada. Inmortalidad y resurrección serían así propiedades del alma y si el alma, siguiendo a Freud, son ‘memorias’, es propiedad de éstas ser inmortales y poder resucitar.



Además, las vivencias configuran una particular realidad que aunque diferente a la perceptual objetiva es más ‘real’ que la misma. Esto resulta evidente cada vez que constatamos cómo una ‘misma’ realidad objetivaes vivida de modos muy diversos por diferentes sujetos. Es que las vivencias también estructuran la realidad objetiva que percibimos y esto justifica la creencia del primitivo en el alma de las cosas, el animismo.



El poder de estas vivencias es enorme. Pensemos simplemente en el ataque fóbico que puede provocar la aparición de un gato. Desde el punto de vista de ‘la realidad objetiva’ nadadel gato lo justifica. Pero tomemos esta frase literalmente: ‘la nada’ del gato justifica la fobia. Es que el hábitat de las vivencias es la nada. Habíamos dicho que el alma nace de la impresión que provoca el muerto, de la ausencia de percepción objetiva; esa ausencia, esa nada es su hábitat. Es el poder de la nada, donde habitan las memorias de ‘el muerto’, el poder que manejaban los magos y delque se protegía el hombre primitivo como nos protegemos hoy con la neurosis.



Como bien lo sabía el primitivo, las ‘leyes de la magia’ que manejaba el brujo –similitud y afinidad- son muy otras que las que concebimos para lo que llamamos las leyes naturales de la ‘realidad objetiva’. Freud las discernió: son la contigüidad y semejanza, las que también hacen a los dos principiosesenciales de los procesos asociativos del lenguaje. Los caminos de la magia son pues recorridos por la ley de la palabra y el poder de su acción es el de hacer ‘contacto’. Agrega Freud: “pongamos de relieve que los dos principios de la asociación –similitud y contigüidad- coinciden en la unidad superior del contacto. La asociación por contigüidad es un contacto en el sentido directo, y la asociación porsimilitud lo es en el traslaticio…..Es la misma extensión del concepto de ‘contacto’ que se obtuvo en el análisis del tabú” (2). Recordemos que el elemento común a todo tabú es el contacto, el tabú de contacto.
De tal modo, estas leyes son las que rigen los preceptos tabú para protegerse de su poder y también las que maneja el mago para hacerse de ese poder, giran alrededor del concepto de...