El Principito

Análisis del Principito
Capítulo I
La cuestión que Saint-Exupéry  nos plantea al inicio de su obra “El principito”, es un problema básico de teoría del conocimiento que ha ocupado a los filósofodesde Platón, al menos: ¿existe objetividad o solo interpretaciones? ¿qué es lo esencialmente real de un objeto, existe esa esencia o todo el universo no es más que un juego de las estructuras de mipensamiento?
    No me voy a centrar en este asunto, ahora quiero tratar el problema de teoría estética que también vemos reflejado en esta fábula. La pregunta es: ¿qué representa el dibujo, un sombreroo una boa? La respuesta ingenua será que el dibujo representa una boa porque eso es lo que intenta representar el aviador y no el sombrero que ven las “personas mayores”, ahora bien, ¿hasta que puntola voluntad del artista debe ser impuesta al espectador? Por lo general no estamos dispuestos admitir, aunque sea una posición muy discutible, que nuestras valoraciones estéticas estén sujetas acriterios externos a nuestra propia sensibilidad. Nosotros como espectadores no solemos asumir sumisamente la interpretación del autor como la única válida, analizamos y sentimos la obra de arte desdenuestra propia perspectiva, que consideramos al menos tan cierta como la del propio creador.
    Sin embargo, debemos intentar comprender que a una perspectiva estética más objetivista no le faltatampoco argumentos. El artista al crear su obra desea transmitir un mensaje, si crea desde una mentalidad objetivista, el hecho de que el público interprete la obra de un modo distinto a como él pretendeno podrá menos que generarle sentimientos de frustración. Imagina un director de cine que hace una película pretendidamente de terror y que al público le produce risa. La voluntad del director y delpúblico entra en conflicto y lo más habitual será que el director no sienta con gusto esta incomunicación entre los sentimientos que quería producir a los espectadores y los que realmente produce. De...