EL PROCESO DE ADAPTACION EN EL FINZENÚ: UN CONCEPTO OLVIDADO POR LOS NUEVOS POBLADORES Una reflexión hecha después de conocer las obras de ingeniería de los Zenues y observar la cartografía histórica realizada por las diferentes expediciones españolas en los siglos XVII al XIX en el Medio y Bajo Sinú, y el desconocimiento del territorio por parte de los nuevos pobladores, luego que sus primeros habitantes (Zenues) encontraron la forma de adaptarse a un entorno en el cual pudieran vivir en armonía. En los valles del “Ryo Synu” y San Jorge, sin duda alguna, es uno de los mejores ejemplos de adaptación al medio por parte de los Zenues. La región que hizo parte de este proceso de armonía con el entorno, estaba compuesto por tres provincias: Zenúfana, cubría la ribera parte de Córdoba, del río Toguí y Cauca en Antioquia; Panzenú (Panzegua), todo lo que hoy comprende la región de la Mojana ‐Oriente del río San Jorge‐. Y por último Finzenú que era la provincia religiosa que regía las llamadas sabanas de Bolivar, Sucre y Córdoba, denominadas por D. Miguel de Anguiano en un Mapa Topográfico de 1805 como las Sabanas de Tolú (Servicio Histórico Militar de Madrid, 1982), así como el bajo y medio Sinú extendiéndose hasta las riberas del río San Jorge. La explicación del concepto de adaptación es importante si lo consideramos con el propósito de analizar los pasos debido a los cuales una población interactúa con su ambiente. Aún si tenemos en cuenta que tal concepto va más allá de las diferentes maneras de interacción entre los individuos, comunidades, nación, y el ambiente que los rodea. Este proceso de adaptación al entorno, fue el resultado de la práctica de la reciprocidad como representación para distribuir los bienes producidos por todos para el bien común (Granada, 2003). Dos mil años atrás, la región del Panzenú, producía suficiente alimento para las otras dos provincias que componían el gran Zenú, mientras que la Zenúfana proporcionaba oro a las poblaciones de orfebres (Plazas et. al, 2005), convirtiéndose en un claro ejemplo de beneficio del sistema social y ambiental, ya que no hay una lucha a muerte de los recursos de una región y otra. De esta forma no se tiende al enriquecimiento individual y, por ende, a una falta del bienestar común. Lo anterior demuestra lo planteado por Granada (2003) al decir que “muchas sociedades (…) valoran la práctica de la reciprocidad como forma de distribuir los bienes producidos por todos para el bien común”. Pero además dice que esta es una función clave asignada a la religión y a rituales fundamentales para la subsistencia de una identidad étnica; convirtiéndose en un esencial de la cultura, como referente a la interpretación de nuestros orígenes. Entonces si adaptación es saber vivir con el medio recíprocamente, en una comunidad donde gane el individuo y el medio ambiente para que así pudiera subsistir la identidad de los pobladores, ¿Qué tienen que ver con la cultura y la religión? Pues bien, en una búsqueda clara para definir qué es cultura Garcés (2002) encuentra, entre muchas otras definiciones, una especificada por el
filósofo Bunge en donde las clasifica en dos: Cultura d élite y cu o de ultura popula Esta últim ar. ma, compu uesta por canciones, mitos s, leyendas, e etcétera. Era u una cultura q que se aprend día en cualquier parte yy en cualquier evento. “Era a cultura prod ducida por el pueblo para el pueblo” (G Garcés, 2002, , p. 28). Co on esta forma a de llegar a t tener el conocimiento, de cómo se deb bían adaptarse e al entorno los primer ros pobladore es de la provincia del Finz zenú, se llega a a concebir, no solo por que se ve en n la necesid dad de vivir c con la natural...
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