El proceso de construccion de la figura de zapata

EL PROCESO EN LA CONSTRUCCION DE LA FIGURA DE ZAPATA.
“Pegados a la cola del caballo del jefe Zapata”.
John Womack jr. En Zapata y la revolución mexicana
Con la cercanía y el alboroto por el Bicentenario los preparativos para celebrar tan magno acontecimiento no se han hecho esperar; y a pesar que la mayoría se ha enfocado a la Independencia no se puede olvidar que para fecha similar laRevolución mexicana también cumplirá su primera centuria. Sin embargo parece que la política del régimen quiere verse mas como el heredero de La Independencia que de la Revolución.
Y no es para menos, los personajes siempre han jugado un papel primordial en la legitimación de los gobiernos, y para el actual régimen, la revolución agraria y todo lo que significa resulta incomodo para su política. Por ellono es de extrañar que la historiografía actual este llevando a cabo la reconfiguración de antiguos o hasta nuevos personajes como es el caso de Porfirio Díaz o de Primo de Verdad.
Desde siempre la política ha recurrido al uso de personajes simbólicos, pero la historia ha tenido un quehacer importante en la construcción de los “mesías”, ya sea desde un lugar legitimador o desde uno rebelde.
Lamanera de influir en la producción historiográfica es por medio de lo que el mismo acontecer histórico nos va marcando, es decir, debemos recordar que el hombre no escapa a su tiempo y lo que el hombre viva se manifiesta en sus “escuelas” o corrientes de estudio.
Por ello considero pertinente retomar la figura de Emiliano Zapata como el ejemplo de la construcción que la historia hace de susmentores, a la vez que la evolución de las visiones nos va marcando las pautas del cambio en el pensamiento. Se trata de usar a Zapata como el pretexto que nos permita comprender como las diversas corrientes historiográficas se contraponen para explicar una misma circunstancia histórica.
Para llevar a cabo esta labor usare a dos autores Antonio Díaz Soto y Gama y Enrique Krauze —en lo personal pienso— sondos intelectuales que de alguna forma se adhirieron al régimen, no obstante su forma de percibir al caudillo del sur cambio conforme los regímenes pos revolucionarios fueron manifestando su política agraria. Otra advertencia es que aunque hablemos de Zapata no me enfocare precisamente al conocido historiador del zapatismo Jhon Womack, este más bien será como una referencia en el giro de enfoquepara comprender al caudillo.
En nueve décadas desde la muerte de Zapata su imagen ha representado bandos contrarios de la revolución mexicana: del cardenismo al alemanismo hasta llegar, inclusive, al salinismo. Pero el avance de la globalización y el recrudecimiento de las condiciones campesinas en México hicieron que la imagen del caudillo fuera revalorada como signo de entereza moral y dignidaden los movimiento contra el libre comercio, y su imagen forma parte ya de esas dos historias: la institucional y la de resistencia.
La Revolución aún se respira en el ambiente.
Esta puede arrancar tras el asesinato de Zapata en Chinameca y el reconocimiento del gobierno de Venustiano Carranza, pero aun para este periodo Zapata resulta ser un personaje incomodo para el nuevo estado nacional;conforme transcurrieron las circunstancias y Obregón llego al poder con el apoyo de líderes zapatistas, la proyección del caudillo cambio pues comenzó a servir para los fines de legitimación revolucionaria principalmente en la parte del contenido social de esta.
Por ello la imagen negativa del “bandolero” se fue transformando en una más positiva de “apóstol del agrarismo” y hasta de fundador del Méxicomoderno. Y aunque esta conversión no fue fácil las políticas tomadas por el nuevo régimen sirvieron para conseguir el apoyo de los campesinos y los sectores populares.
Cuando la revolución se hizo gobierno, llevo a cabo un programa, que hasta el momento podría considerarse novedoso y benéfico; le adscribió a una institución del Estado el proyecto de integrar el país por la vía de la educación y...