El profanador
Por: Mircea Eliade
I. Arquetipos y repetición
Los objetos del mundo exterior como los actos humanos cobran un valor y llegan a ser reales, porque participan en una realidad quelos trasciende. El objeto aparece como receptáculo de una fuerza extraña que le confiere sentido y valor. Así también los actos humanos, su significación y valor están vinculados por serreproducción de un acto primordial. Lo que él hace ya se hizo. Esa repetición consciente de gestos paradigmáticos determinados remite a una ontología original. Participan de una realidad transcendente.
Agrupa alos elementos en las siguientes categorías:
• Los elementos cuya realidad es función de la repetición, de la imitación de un arquetipo celeste.
• Los elementos: ciudades, templos, casas cuyarealidad es tributaria del simbolismo del centro supraterrestre que los asimila a sí mismo y los transforma en centros del mundo.
• Los rituales y los actos profanos significativos que sólo poseen elsentido que se les da porque repiten deliberadamente tales hechos planteados ab origine por dioses, héroes y antepasados.
Arquetipos celestes de los territorios, de los templos y de las ciudades.
Eltemplo tenía un prototipo celeste. Por ejemplo en el monte Sinaí Jehová muestra a Moisés la forma del santuario que deberá tener. También las ciudades tienen su prototipo divino. Por ejemplo lasbabilónicas que tenían sus arquetipos en constelaciones (Nínive en la Osa mayor).
El mundo que nos rodea tiene un arquetipo extraterrestre. Otras regiones corresponden a un modelo mítico pero diferente,de otra naturaleza. Todas las regiones salvajes, incultas, etc., están asimiladas al caos: participan de la modalidad informe de antes de la creación. Por esto cuando se explora un sitio se realizanactos que repiten simbólicamente el acto de creación, así la zona es cosmizada. La transformación del caos en cosmos por el acto divino de la creación, dándoles formas y normas. Por ejemplo con el...
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