El realismo mágico

EL REALISMO MÁGICO Y OTROS ENSAYOS –Enrique Anderson Imbert
El “realismo mágico” en la ficción hispanoamericana
El término “realismo mágico” lo lanzó en 1925 el crítico alemán Franz Roh (en 1927 llegó este término a occidente por la “Revista de Occidente” donde Roh escribía) para caracterizar a un grupo de pintores alemanes. Estos pintores post-expresionistas estaban pintando objetosordinarios, sólo que lo hacían con ojos maravillosos. Es decir, veían las cosas envueltas en la luz matinal de un segundo Génesis. Arte de magia y realidad.
En 1958 reemplazó el término “realismo mágico” con el de “nueva objetividad”. Para entonces el término “realismo mágico” había sido adoptado por el lenguaje de la crítica literaria.
Cuando un término concebido con respecto a las artes plásticasemigra a las artes literarias debe reajustarse a nuevas condiciones. La literatura es arte del tiempo, y se sirve de la palabra y el ritmo. Franz Roh vio, en el proceso histórico de la pintura, una dialéctica que le hubiera complacido a Hegel: una tesis –impresionismo-, una antítesis –expresionismo- y una síntesis –realismo mágico. En el proceso histórico del arte narrativo esta dialéctica selogra a través de tres categorías: una tesis –la categoría de lo verídico “realismo”-, una antítesis –la categoría de lo sobrenatural “literatura fantástica”-, y una síntesis –la categoría de lo extraño “realismo mágico”.
Un narrador realista se planta en medio de la vida cotidiana y cuenta una acción verdadera o verosímil. Un narrador fantástico prescinde de las leyes de la lógica y del mundofísico, cuenta una acción absurda y sobrenatural. Un narrador mágico-realista finge escaparse de la naturaleza y nos cuenta una acción que por muy explicable que sea nos perturba como extraña.
Hay quienes en estos últimos años no asocian el término “realismo mágico” a Roh y, cuando lo hacen, no siempre distinguen entre “realismo mágico” y “literatura fantástica”. Sumado a esto, con el correr de losaños, apareció un término que vino a mezclarse con los dos que ya estaban, y así contribuyó a una mayor confusión en el lenguaje de la crítica: lo real maravilloso.
Este término fue propuesto por Alejo Carpentier que creía que:
Hay una “literatura maravillosa” de origen europeo, referida a acontecimientos sobrenaturales;
La realidad americana es más maravillosa que esa literatura y, por tanto,cabe hablar de “lo real maravillosamente americano”; y
Lo “real maravilloso” podrá trasladarse a la literatura solamente a condición de que los escritores tengan fe en que esa América es realmente maravillosa.
La “sensación de lo maravilloso” presupone fe, según Carpentier. De ahí que lo maravilloso invocado en el descreimiento nunca fue sino una artimaña literaria. Cuando Carpentier dice queen América el escritor se pone en contacto con lo real maravilloso, está suponiendo que lo maravilloso es tan tangible como las cosas físicas. Con la misma lógica –o falta de lógica- podría decir que el astronauta Neil Armstrong tocó “lo romántico” de la luna, siendo que la luna sólo es romántica para quien la contempla con ojos de poeta. Esta es la primera falacia que comete.
La segunda falaciaes la de suponer que para narrar portentos hay que tener fe. La verdad es lo opuesto. El religioso permanece insensible a lo esotérico de sus supersticiones. En el mejor de los casos las supersticiones constituyen un buen material para cuentos de miedo; pero para convertirse en cuentos un incrédulo tiene que dejar de tomarlas en serio y recontarlas con una nueva intención. La literaturafantástica surgió cuando los hombres de una comunidad artística dejaron de creer en lo que contaban.
Hay que saber distinguir entre narraciones sobrenaturales y extrañas. En las primeras, el narrador permite que en la acción que narra irrumpa de pronto un prodigio. Se regocija renunciando a los principios de la lógica y simulando milagros. Ese narrador finge, como explicación de lo inexplicable, la...