El recurso de la piel

El recurso de la piel
Uno de los elementos sospechosos en la consideración de la arquitectura actual es la tendencia a unos tratamientos autónomos de la piel del edificio, a los que se han referido anteriormente. Con ello la arquitectura parece reclamar ahora su patente artístico en la expresión sectorialmente artística del volumen aleatorio, las texturas y los colores. La calidad de la pielestá adquiriendo un nuevo protagonismo en incluso reclamando una valoración casi autónoma.
Parece que el arquitecto quiera que no lleguen a la fachada las licitudes realmente arquitectónicas que provienen de los programas de uso, de los distintos materiales, de las estructuras, de las irregularidades de la producción.
Hasta aquí, esas pieles se construían solo con la neutralización expresiva de unoselementos específicamente arquitectónicos, pero recientemente, la piel se ha constituido cas en un proyecto autónomo con elementos, estructuras y texturas que provienen más bien de otras expresiones artísticas. Hay toda una generación de arquitectos centroeuropeos que se han esforzado en implantar incluso cierta autonomía de la textura de la piel, conseguida a menudo con materiales que secontradicen con los que predominan en la obra. Suiza es un país muy peculiar, por una parte los arquitectos del ticiano se mantienen en unas propuestas volumétricas y caligráficas, que los emparentados con las derivaciones milanesas. Por el lado alemán crean una línea que se opone a la otra y que proviene de la Escuela de Zúrich, en la cual tuvieron gran influencia las enseñanzas de Aldo Ross, queproclamaba un nuevo orden metafísico, y al mismo tiempo una tendencia tectónica y unas referencias a la historia como continuidad.

La ciudad, un lugar
No empezare con la pedantería de definir que es la ciudad que es la ciudad entre otras razones porque no soy un partidario de esa clase de definiciones y porque es imposible resumir en pocos rasgos todas las ciudades y todas las épocas en las cualesla misma ciudad se ha expresado y se ha configurado. Se me ocurre solamente una característica: la ciudad suele ser el lugar físico y social en el que se producen las máximas o mejores posibilidades de información, de comunicación y de alcanzar inmediatamente los resultados de esa información. Es decir, además de otras condiciones esenciales para la vida colectiva, la ciudad es el lugar dondecoinciden físicamente más cosas, donde las codas se encuentran más a mano y donde la proximidad organizada estructura el programa de una vida política.
Las últimas conquistas tecnológicas han permitido a algunos geógrafos urbanos, sociólogos y urbanistas presumir que, para alcanzar esas condiciones, no era necesario que la ciudad fuera un lugar y que, por lo tanto, en la civilización actual, laciudad, tal como ha estado configurada, no era un escenario indispensable.
Ahora bien, para que este gripo funcione con naturalidad, hay que añadirle otra artificialidad, un espacio (una forma y una estructura) pensado y ordenado, construido con el propósito de favorecer la estabilidad (o la vitalidad transformadora) del sistema. La arquitectura y el urbanismo son instrumentos, no únicos peroevidentemente fundamentales para la construcción de ese espacio colaborador y sugerente que participa en la urbanidad. Hay que preguntarse cuáles son los elementos esenciales que desde la arquitectura y el urbanismo han de apoyar esa estructura social, es decir, esa urbanidad. Sin conflicto funcional, sin compacidad y sin legibilidad es muy difícil que una ciudad favorezca los valores individuales ycolectivos que le hemos atribuido, desde la oferta de información hasta la creación de nuevas identidades colectivas.
Por otra parte, me parece que algunas monstruosidades urbanas americanas y asiáticas ya no se pueden analizar como ciudades, sino como alternativas de asentamiento humano distanciado de los conceptos de ciudadanía, No puedo, pies, extender ahora los comentarios sobre la ciudad a...