El retrato en el espejo

El retrato en el espejo

Recuerdo el día en que li padre se fue, y me hizo prometerle que jamás miraría a través del cristal que muestra el exterior de nuestra casa.
Se lo jure y el creyó que era una buena hija. Me juro que regresaría, un dos y entonces, solo entonces, entonces hasta halla y yo podría contemplar que hay mas allá de ese blanco inmaculado y melodioso que esconde el mundoexterior.
Pero ya a pasado bastante tiempo desde entonces, y no solo ha perdido la magia del reclusorio, con sus paginas y paginas de libros enmohecidos, que guardan conocimiento con custodios hermosos como son los nombres de las personas que si Verón el mundo, si no que también ese alude arcano que rodeaba al mundo a través de la cortina blanca se ha ido.
Y tal vez haya terminado por convencerme deque al fin y al cabo, no hay nada mas allá y mi padre solo le limito para que yo no me atraviese a observar la nada absoluta.
Pero yo no se lo habría recriminado sino hasta esta aciaga noche, a la luz de una de las infinitas velas que poca o ninguna luz me ha aportado en estos tiempos. Algo ha pasado, algo que no debería contemplarlo nunca.
Hace unas horas, deje mi habitación, llevando un platode comida a la cocina para limpiarlo cuando mi visión, enfebrecida por el cansancio contemplo el espejo que da a la cara de mis aposentos. Lo que vi no pude describirlo.
Sé que hay alguien ahí con migo pero me niego a describirlo, recordar su irada me aterra pronto de irán los últimos rayos de sol del día y esa mirada se quedara ahí con migo.
Golpeando el suelo estoy agradecida de que mi sangrebrote al suelo tal vez signifique que hay algo mas, y al mirarlo comprendo que mi existencia se funde en la nada.
Esa fría mirada fue una vez de mi padre.







La piedra que se movía
Hacia un tiempo que un conejo no aparecía delante de un animal llamado atoj, a quien había jugado muchas pasadas pero llegando una fiesta conocida como la fiesta del desgrane donde ese conejo debe estarespiando y saqueando un gran botín.
Suttu se Dirigió a una de las fincas para obtener el prestigiado maíz pero de repente se encontró con atoj quien había también hurtado maíz, el conejo de apoyo contra una roca enorme y atoj dijo
-aja. Tu conejo ladrón. Ahora si no te libras, ¿qué haces ahí?
-Tío, respondió el conejo asustado yo estoy sosteniendo esta roca enorme para que no ruede y no nosaplaste., simulando el pobre conejo esfuerzos el otro le creyó.
-Tío zorro, dijo el conejo, porque no te quedas en mi lugar mientras yo busco una rama para trancar la roca.
-Me parece bien hijo, respondió el incrédulo zorro.
Mientras que el astuto conejo huyo con el botín hurtado desapareciendo de su vista, mientras que su tío aun pensaba que era pesada y hacia esfuerzos inútiles.Papi no quiere dormir


Una mañana, mi abuelo “papi” -como todos le decíamos en casa-, decidió no dormir por toda esa noche y la otra y la que sigue, decía él.
Llegada la noche todos esperábamos que la cama de “papi” estuviese ocupada por el cuerpo largo pero fuerte de él. Acostumbraba dormir boca arriba con las manos en el pecho, se quitaba los anteojos y de un bostezo comenzabaa roncar, todos sabíamos que esa noche pasaría lo mismo; incluso apostamos nuestra rebanada de pastel del otro día de cada uno.
Yo, sabía que “papi” era un hombre cabal, de palabra y cumpliría, así que decidí apostar a favor de él -aunque tenía mis dudas-. Llegó la noche y todos de vez en vez salíamos de nuestra cama para revisar la recámara de “papi” y ver si estaba dormido, pero nada.
Enningún momento apareció, ¿dónde estaba?, eso era aún más intrigante, pues Fernando el primo mayor bajo a buscarlo y nunca lo encontró. ¡Dios mío! exclamó mi madre, en la mañana cuando “papi” no bajo a desayunar y peor cuando subió a su recámara y no lo vio.
Todos comenzamos a preocuparnos, excepto yo, sabía que “papi” estaría en el río, o en el parque caminando o tal vez viendo la tv, con algún...