El rey arturo y los caballeros de la mesa redonda ( segunda parte ) más acerca de : el rey arturo y los caballeros de la mesa redonda

Cuenta la leyenda que Uther, Rey de lo que se conoce ahora como Gran Bretaña, decidió un día firmar la paz con uno de sus más bravíos enemigos: el duque de Cornwall. El infante fue bautizado con el nombre de Arturo. Cuando Arturo contaba con dos años su padre, Uther, murió. En la hoja de la espada estaba inscrito: "quien pueda desencajarme de esta piedra será Rey de toda Bretaña por derecho denacimiento". Ante este milagro todos los nobles intentaron sacar la espada, sin ningún resultado. En uno de esos torneos (años después de la muerte de Uther), participaba Sir Héctor y Sir Kay, su hijo. Arturo no participaba porque era todavía un muchacho de quince años, Cuando se dio comienzo a la competencia, Sir Kay se dio cuenta que no tenía su espada, entonces le pidió a su hermanastro que sela fuera a buscar a su casa. Arturo fue corriendo a buscarla pero no pudo entrar a su casa, pues estaba cerrada, entonces se recordó de la espada que estaba en el cementerio y fue en su busca. Al entregársela a Sir Kay , éste se dio cuenta al instante que era la espada del cementerio, así que se la enseñó a su padre. Sir Héctor quedó lleno de estupefacción y se llevó a sus hijos hasta elcementerio. Allí le dijo a Arturo que volviera a meter la espada en su sitio, Arturo lo hizo. Al ver a su hijo adoptivo sacar la espada tan fácilmente se postró de rodillas al igual que Sir Kay. Arturo se asombró de esto y Sir Héctor, con voz emocionada, le explicó que desde ese momento sería el Rey de toda Bretaña. El arzobispo reunió a todos los caballeros alrededor de la espada y dejó probar su suerte acada uno. Dejó para el final a Arturo y éste volvió a sacar fácilmente la espada de la piedra, esta vez delante de un gran número de personas. El rey no se había dado cuenta que ese viejo indefenso no era otro que el mago de la corte, el gran Merlín. Unos minutos después se encontraron con un caballero en la mitad del camino, quien con aire arrogante les dijo: "nadie pasa por aquí sin antes pelearconmigo".Arturo aceptó el reto y, aunque luchó con fiereza, el caballero era mucho más diestro. Después de esto Merlin le explicó que el nombre de ese arrogante caballero era Pellinore y sería el padre de Percival y Lamorak de Gales. Arturo no le dió mucha importancia a todo lo que dijo el mago, estaba mas preocupado por su espada, que se había perdido en la pelea. "Ahí está tu espada", dijoMerlin. Arturo aceptó y la dama le dijo:" Toma mi barca y navega hasta donde está el brazo, él te dará la espada. Esta espada sería la protagonista de innumerables batallas victoriosas y de grandes hechos heroicos. El Rey Arturo comenzó sus primeros años de gobierno pacificando al país, y creando un mejor estado de vida. En esta mesa cabían hasta ciento cincuenta caballeros sentados. Cuando Arturoescuchó las noticias que le traía Merlin, se alegró mucho y mandó a Sir Lancelot (su mejor caballero) a recibir a Guenevere y llevarla a Palacio. Cuando Sir Lancelot vió por primera vez a la futura reina se enamoró perdidamente y ella a su vez le sucedió lo mismo. La mesa se colocó en un gran salón del palacio. Merlin, que estaba en el salón de la mesa redonda, dijo en tono muy solemne: "Caballeroses el momento para que cada uno le rinda homenaje al rey". Arturo lo hizo pasar. Este caballero aún no ha nacido". El Santo Grial era el cáliz donde José de Arimatea había depositado la sangre de Jesucristo. Sir Lancelot vio este mensaje y supo que Galahad, su hijo, era el mejor prospecto para sentarse en esa silla. Cuando Sir Galahad cumplió los quince años entró al salón de la gran mesaacompañado de un anciano. El anciano le apuntó el asiento prohibido y todos los caballeros observaron como se formó magicamente el nombre de Galahad en el espaldar de la silla. Sir Galahad tomó asiento en la silla prohibida y todos quedaron maravillados y le rindieron honores al digno caballero. El rey Arturo instó a Lancelot y a Gawain para que intentaran sacar la espada, pero fue Sir Galahad quien la...