EL SALTAMONTES ERNESTO

EL SALTAMONTES ERNESTO

Narrador: Hace mucho tiempo en un jardín grande y hermoso los animalitos que vivían en el se preparaban para recibir la primavera, entre ellos había un pequeño saltamontes llamado Ernesto que caminaba por el jardín... escucharon bien niños, Sí, sí, caminaba; todavía no saltaba porque no lo había intentado nunca. Ernesto no intentaba hacer nunca nada. Cuando alguien ledecía que hiciera esto o aquello, siempre respondía lo mismo.
Saltamontes Ernesto: ¡Es que no sé!... ¡Es que no puedo!
Narrador: Mientras tanto en la casa:
Mamá saltamontes: Qué haces hijito?
Saltamontes Ernesto: Aquí observando el jardín
Por qué mami?
Mamá Saltamontes: Ayúdame a recoger la casa
Saltamontes Ernesto: ¡Es que no sé!... ¡Es que no puedo!
Mamá Saltamontes: Bien hijito, yo haré tuparte
Narrador: Ernesto sólo se alimentaba de alguna hierba amarga que había en el suelo. En eso estaban cuando llegó papa saltamontes y este le dijo a Ernesto.
Papa saltamontes: - Acompáñame para comer unas suculentas hojas tiernas.
Narrador: Ernesto le contestó:
Saltamontes Ernesto: —¡Es que no sé!... ¡Es que no puedo
Papá Saltamontes: Déjalo hijo, yo iré.
Narrador: En el otro lado deljardín, Catarina Carolina, Mariposa Mari y Hormiga Nina jugaban como todos los días un juego divertido llamado TULA. Catarina Carolina, Mariposa Mari y Hormiga Nina — Le dijeron a Ernesto.

Catarina Carolina, Mariposa Mari y Hormiga Nina: ¿Juegas con nosotros?
Narrador: Y Ernesto contestó como siempre, como tantas y tantas veces:

Saltamontes Ernesto: —¡Es que no sé!... ¡Es que no puedo!Narrador: Y así siempre Ernesto contestaba lo mismo.... Un día comenzó a nublarse el cielo, soplaba un fuerte viento y se escuchaban unos ruidosos relámpagos. Entonces comenzó a llover y todos los animalitos del jardín quedaron mojados, Catarina Carolina, la hormiga Nina, la mariposa Mari, dijeron.
Catarina Carolina, Mariposa Mari y Hormiga Nina
Que fuerte estuvo la lluvia
Yo tengo frío
Estoy empapadahasta las alas
Y ahora cómo nos secamos?
Subamos a las hojas de aquella flor para estar más cerca del sol y podernos secar
Narrador. Todos subieron a aquella flor…Bueno, todos no. Ernesto se había quedado abajo, empapado por el agua de la lluvia. Sus amigos le animaban para que subiera.
Todos los animalitos:
—¡Ernesto, sube a esta hoja para secarte!
Pero Ernesto respondía como siempre:
—¡Es queno sé!... ¡Es que no puedo!

Narrador: Todos insistían:
—¡Pero sube, no te das cuenta que te vas a enfermar!

Narrador: Ernesto repetía perezoso:
Saltamontes Ernesto: —¡Es que no sé!... ¡Es que no puedo!
Narrador: Sus amigos no dejaban de animarle:

Todos los animalitos:
—Nosotros hemos trepado con mucho esfuerzo, pero tú sólo tienes que saltar.
Narrador: Ernesto, como siempre, ni siquiera lointentó. Se marchó llorando mientras los demás seguían tumbados al sol.
Saltamontes Ernesto:—¡Buaaa!... ¡Buaaa! —
Narrador: En eso apareció la abeja Florinda, la reyna del jardín, al escuchar el llanto de Ernesto y se acercó.

Abeja Florinda—¡Hola! ¿Por qué lloras? ¿Cómo te llamas? —
Saltamontes Ernesto: —Me llamo Ernesto y lloro porque no estoy arriba con los demás secándome al sol —contestóErnesto.
Abeja Florinda —¿Y por qué no estás arriba? ¿Te has caído? —
Saltamontes Ernesto: —No, no he subido... —le dijo Ernesto.
Abeja Florinda —¿Y por qué no subes y dejas de llorar?
Narrador: Entonces Ernesto pronunció esa frase que todos estaban acostumbrados a oírle:
Saltamontes Ernesto: —¡Es que no sé!... ¡Es que no puedo!
Narrador: Florinda, se quedó extrañada y sonriendo, le volvió apreguntar:
Abeja Florinda: —¿Por qué no puedes? ¿Acaso lo has intentado?

Narrador: Ernesto, con un poco de vergüenza, le dijo en voz bajita:
Saltamontes Ernesto: —No... no lo he intentado, yo nunca intento nada.
Abeja Florinda: ¿Es que nadie te ha enseñado que todo requiere su tiempo, que las cosas se van aprendiendo poco a poco, y que lo único que tenemos que hacer es intentarlo todas las veces...