El señor tu sanador

EL SEÑOR, TU SANADOR

Por el Pastor Bert Hakansson

Muchas personas están buscando la verdad sobre la salud y la sanidad. Algunas están buscando en lugares extraños, consultando hechiceras y otros ocultistas mientras que otras acuden solamente a la profesión médica. Aquellas que acuden a los ocultistas van de veras al diablo en busca de ayuda y muchas veces la encuentran. EI peligro está enque el diablo puede dominar su alma para siempre.

Los padres de una chica muy enferma la habían llevado a muchos médicos en vano. La chica había empeorado y le quedaban solamente unos pocos meses de vida. Al ser informados acerca de un sanador por la fé que visitaba la ciudad, decidieron llevarle la niña. Oró por la chica y le entregó un medallón para que se lo colgase alrededor de su cuello.Les dijo a sus padres que la chica se encontraría bien siempre que llevase puesto el medallón. ¡Efectivamente, la chica se encontraba bien! Todos estaban encantados y daban la gloria a Dios. La familia comenzó a leer la Palabra y a asistir comúnmente a la iglesia. La familia entera recibió a Jesús como su Salvador y nacieron de nuevo. Vieron en la Biblia que el método de sanidad de Dios no teníanada que ver con los medallones. Consultó a su Pastor y acordaron que juntos le quitarían el medallón. Después de hacerlo, lo descompletaron. Dentro llevaba la inscripción, “Satanás, guarda bien a esta chica hasta que tengas su alma en el infierno“. Su salud era un precio pequeño para él para pagar por su alma. Al tirar el medallón, pidieron perdón al Señor por haber estado buscando la sanidad deforma errónea. Pidieron al Señor que sanase a su hija y ¡Jesús lo hizo!

Muchas personas sufren artritis. Llevan brazaletes de cobre o magnéticos en busca de un poder desconocido para curarse. Hay otras cosas ocultas que la gente hace para buscar la sanidad. De veras es asombroso. Discuten que es bueno, que les ayuda, debe ser de Dios. Recuerde que todo lo que Dios hace está basado en Su Palabra.Si difiere con la Biblia, no es de Dios.

La mayoría de nosotros hemos ido en una u otra ocasión a los médicos para buscar ayuda y nos han ayudado. Podemos alabar al Señor por los médicos y enfermeras, pero, el Señor ha preparado un camino para nosotros para que crezcamos espiritualmente y para que alcancemos un lugar donde no necesitemos sus servicios. Todo cristiano puede vivir en sanidadDivina total y perfecta, jamás volver a estar enfermo, jamás volver a tener fiebre. Usted no puede creer que esto es verdad? Mi oración es que usted vea en este librito a través de la Palabra de Dios que esto es verdad y que puede ser suyo si usted cree. La Palabra es verdad y es la única base de la vida.. “ Pues nadie puede poner otra base que la que está puesta, la cual es Jesucristo mismo“ (1Corintios 3:11)

Desde luego, tenemos que poner nuestra parte. No podemos comer “comida basura”, dormir poco, no practicar ejercicios y esperar que Dios nos mantenga sanos. Tenemos la responsabilidad para nuestro cuerpo y alma de mantenerlos en orden. Se da por sentado que nuestro cuerpo es él ¡templo del Espíritu Santo!

Mi familia y yo vivimos en sanidad Divina. Probamos la Palabra de Dios adiario en nuestras vidas. Mi esposa y yo tenemos tres hijos. Desde 1971 hemos vivido todos en sanidad Divina. Esto no es el resultado de nuestra bondad o algún privilegio especial ni el pensamiento positivo o la confesión. Es la gracia de Dios revelada en la Palabra a todos Sus hijos. En nuestro hogar no tenemos un termómetro para medir la fiebre. Vemos en la Palabra que los creyentes no debemos tenerfiebre. La fiebre es uno de los males. “Pero acontecerá, si no oyeres la voz de Jehová tu Dios, para procurar cumplir todos sus mandamientos y sus estatutos que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te alcanzarán. Maldito serás tú en la ciudad, y maldito en el campo. Maldita tu canasta, y tu artesa de amasar Maldito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, la...