El sexenio democrático

El Sexenio Revolucionario (1868-1874): intentos democratizadores

En el último periodo del reinado de Isabel II, entre 1863 y 1868, se produjeron una serie de crisis económicas y políticas que mostraban, por una parte, las deficiencias del sistema liberal y, por otra, la debilidad de la economía capitalista en España. Esto conducirá al fin de su gobierno.
El triunfo y consolidación delliberalismo durante el reinado de Isabel II (1833-1868) impulsó la modernización del país y el crecimiento económico. Sin embargo a partir de 1860 la expansión industrial y económica experimentó un frenazo. La crisis comenzó en el sector ferroviario, cuya falta de rentabilidad terminó hundiendo a las entidades que lo habían estado financiando. La crisis financiera coincidió con una crisis industrial,sobre todo en Cataluña. La Guerra de Secesión americana había interrumpido Ia producción de algodón en rama en aquel país, lo que provocó una subida mundial de los precios. Si a esto añadimos que existía una crisis económica general que había hecho descender de matera notable Ia demanda, muchas empresas textiles que utilizaban el algodón como materia prima, sobre todo Ias más pequeñas, tuvieron quecerrar. EI paro aumentó y el nivel de vida del conjunto de los trabajadores descendió.
Además se produce una crisis de subsistencias, como consecuencia de una serie de malas cosechas. El trigo escasea y, por tanto, se encarece.
Así, eran muchos los sectores de Ia población que tenían motivos para sentirse descontentos con el régimen de Isabel II:
En 1866, el Gobierno O’Donnell reprimióduramente una rebelión de sargentos en el Cuartel de San Gil, que pedía reformas políticas. O’Donnell fue apartado del gobierno por la reina, pero sus sucesores también moderados cerraron Ias Cortes y siguieron gobernando por decreto.
Ante esta situación, el Partido Progresista, dirigido por el general Prim, y el Partido Demócrata, firmaron un acuerdo conocido como el Pacto de Ostende, planteándose comoobjetivos inmediatos destronar a Isabel II y acabar con el gobierno de los moderados. A finales de 1866, después de la muerte de O’Donnell, leal a la reina, se sumaron al pacto los unionistas que aportaron una buena parte de la cúspide del ejército.
Finalmente, en septiembre de 1868 la escuadra concentrada en la bahía de Cádiz al mando de Topete, protagonizó un alzamiento militar contra elgobierno de Isabel II. Prim y Serrano se reunieron con los sublevados y consiguieron rápidamente el apoyo de la población gaditana. El gobierno de Isabel II envió un ejército para defender el trono, pero la batalla librada cerca de Córdoba la dio la victoria a los sublevados. Tras la derrota Isabel II huye al exilio.
En muchas ciudades españolas se constituyeron Juntas revolucionarias. Los sublevadospropusieron a la Junta revolucionaria de la capital el nombramiento de un Gobierno provisional de carácter centrista. El general Serrano fue proclamado regente y el general Prim presidente del Gobierno.
El nuevo gobierno provisional convocó elecciones a Cortes constituyentes, y los comicios fueron los primeros en España que reconocían el sufragio universal masculino. Le dieron la victoria a lacoalición gubernamental y partidaria de la fórmula monárquica. Las Cortes se reunieron y crearon una comisión parlamentaria encargada de redactar una nueva Constitución que fue aprobada en 1869. La Constitución de 1869 estableció un amplio régimen de derechos y libertades (libertad de prensa, de residencia, de enseñanza, de culto) y el Estado se declaró monárquico, pero la potestad de elaborar lasleyes residía exclusivamente en las Cortes y el rey sólo podía promulgarlas.
Pero la Constitución de 1869 consolidó un régimen político basado en los principios liberal-democráticos. La forma de gobierno monárquica disgustó a los que aspiraban establecer un régimen republicano; el mantenimiento del culto y del clero desagradaba a los sectores radicales; y la persistencia de las desigualdades...