EL SUEÑO DE UN JUGADOR


EL NACIMIENTO DE UN
FENÓMENO
“KILI”
Txetxu Núñez
1
Edgar y Mª Mercedes viven en un pueblito de Perú, llamado PORCON BAJO; tiene alrededor de doscientos habitantes y se conocen todos entre sí. Acaban de casarse y se quieren con locura; ambos tienen la misma edad: dieciocho años. Edgar es fuerte, alegre, con un pelo negro y largo, los ojos rasgados y de color negro; es más alto que bajo.María Mercedes es guapa y alta, tiene un encanto especial, pues siempre está sonriente. En su pueblo no hay futuro. Un día, después de volver del trabajo en el campo, Edgar le dice a María Mercedes: -Tenemos que irnos a una gran ciudad, aquí no hay porvenir para nuestros hijos.
María Mercedes le contestó: Pero ¿cómo vamos a irnos si apenas tenemos dinero? Y ¿a dónde iremos? - Lo vengo pensandodesde hace tiempo y creo que Francia será un buen país, para nosotros y nuestros hijos. He oído decir que allí hay trabajo y pagan bien. Bueno, yo iré donde tú vayas, le contestó María Mercedes. Pasó un mes, durante ese tiempo fueron preparando todo para su marcha, vendieron lo que tenían y con lo poco que les dieron, se pusieron en camino. Tuvieron que coger un tren y un barco para llegar a sudestino: Francia. Allí les aconsejaron que fuesen a vivir a un pueblo bonito donde había trabajo, llamado Blouis. Y allí se fueron.
Cuando llegaron, efectivamente, les gustó el pueblo ,era sencillo y bonito, las gentes parecían amables y había mucho movimiento.Pasaron dos años y Edgar y María Mercedes ya se habían establecido. Edgar encontró trabajo en una fábrica y María Mercedes cuidaba la casa deunos señores, éstos eran Los Lafontei.La casa de Edgar y María Mercedes era bonita aunque pequeña. Solo tenía una habitación, un cuartito que hacía de sala dormitorio, un baño y la cocina. María Mercedes estaba embarazada y quedaban quince días según el médico para que naciese su primer hijo. Edgar y María Mercedes estaban ilusionados. Tenían unas ganas locas de poder tenerle en sus brazos. Llegóel día; María Mercedes estaba en la casa de sus señores haciendo las faenas de la casa, cuando le vino un dolor repentino; María Mercedes se alarmó pues ya había salido de cuentas, llamó a su señora y le contó cómo se encontraba. Sra. Antonieta, creo que me ha llegado la hora, me estoy poniendo muy mala. La Sra. Antonieta, rápidamente, llamó a una ambulancia y, también a la fábrica donde trabajabael marido de María Mercedes para comunicárselo. Llegó la ambulancia y llevaron a María Mercedes alhospital. Cuando Edgar se enteró, salió corriendo de la fábrica hacia el hospital; cuando llegó, María Mercedes ya tenía en su regazo a una preciosa criatura. Edgar se quedó boquiabierto, sin saber qué decir; tanto tiempo esperando ese momento y por fin había llegado. Miró al cielo y comentó: -Gracias Dios mío, desde que salimos de Porcon Bajo, todo nos ha ido bien, no hemos tenido problemas de ninguna clase. Ayúdanos ahora para poder tirar de nuestro hijo. Dio un beso a María Mercedes y cogió al niño, lo estuvo mirando, estaba encantado, era padre, tenía un hijo, era feliz, ¿que más se podía pedir?. Pasaron tres largos años; al niño le habían puesto de nombre Juan Alberto. Era despierto,inquieto, nervioso, tenía un pelo negro y los ojos rasgados y obscuros. Tenía el cuerpo atlético, bien formado, no podía estar quieto mucho tiempo, enseguida jugaba con algo, miraba las cosas que cogía, como si quisiera saber de que estaban hechas o para que valían, las daba muchas vueltas en las manos y, al final,siempre terminaba jugando con ellas. Sobre todo, le gustaba chutarlas y luego corría apor ellas. Un día, su padre le trajo un taco de madera color verde. Juan Alberto al verlo, enseguida se encariñó con el taco y lo usaba para darle patadas. Había veces que le daba patadas intentando meterlo por el espacio que hay en una puerta, otras veces intentaba pegar con el, a algún otro objeto, su madre le miraba y a la vez se admiraba de la tenacidad de Juan Alberto, se pasaba horas y...