EL SUE O DE LA ANACONDA Copia

EL SUEÑO DE LA ANACONDA.

Les da por aposentos sus entrañas.
Don Juan de Castellanos estaba sentado mirando el patio mientras llovía, observo el árbol en el cual se recostaba en los días cuando el sol era un regalo, oyó los pasos de Gabriel sobre los maderos del corredor, mientras llegaba recordó todo lo que paso mientras estuvo en Nueva Cádiz.
Recordó que a los nativos los explotaban parasacar perlas del mar y los ataban a piedra para que se sumergieran y solo salían muertos o con una gran cantidad de estas. A los nativos les trajeron bares, casa de juego, burdeles, etc., y que supuestamente venían a civilizar pero no fue así.
Castellanos recordó ver una india arrodillada en forma tal que parecía consintiendo el cadáver, otro día cuando iba a su canoa y no vio a ningún indio pensó queellos habían escapado a otra isla buscando la libertad que habían perdido; se había acordado de la historia que le conto un nativo y era la de la gran anaconda que había poblado al mundo a partir de la orden de los dioses y que debía repoblar luego de que estos la acabaran ya que esta era todo. Dio la vuelta y vio a la india y con el gesto que ella le hizo la ayudo a llevar al indio para tirarloal mar, cuando volvieron Castellanos regreso a Nueva Cádiz y la india lo seguía a una distancia que ni la propia sombra de Castellanos terminaba. Al llegar a Nueva Cádiz vio la gran destrucción se quemaba el oro y se destruía todo por parte de los que supuestamente venían a civilizarlos.
Cuando Gabriel llego donde Castellanos hablaron de los temas habituales y Gabriel se dispuso a seguir con sustrabajos cotidianos. Gabriel rescato las notas de los cuadernos de Castellanos con grandes historias

De la verdad de cosas por mí vistas.
A don Juan no solo le dolía el cuerpo sino también el alma por la tristeza que tenia de no poder caminar con facilidad desde su casa a la iglesia que quedaban prácticamente pegadas; esta iglesia que tenia tanta historia y que tanto trabajo le había costadoconstruir.
Don Juan en sus últimos años de vida se había acostumbrado al mal clima, algo que no le importaba ya que su objetivo era dotar a Tunja de un templo que fuera dignó de su ciudad y de Dios. Al frente de su iglesia recordó sus elegías que representaban el centro cultural de Tunja que era su casa donde se debatían las obras mas interesantes con don García Arias de Maldonado, don Jerónimo deCarvajal y Fray Miguel de los Ángeles, habían contertulios como Benjamín Carrión, Juan de Vargas y el maestro sevillano Bautista Vásquez, don Gonzalo el fundador, el padre Juan de Cañada y el escribano cabeza de Baca.
Alonso encontró a don Juan adormilado en uno de los escaños de primera fila, el despertó y no reconoció a su sobrino ya que sus viejos ojos empañados, se les podía ver los recuerdos deuna playa solitaria, una fogata a punto de apagarse y una mujer.
La mujer era la india, don Juan y la india se fueron a la playa, a ella don Juan le pondría el nombre de Macopira, ella fue al mar y salió mojada de pies a cabeza con perlas en los senos y se le entrego a don Juan pero el no acepto ya que no quería ser como sus compañeros que violaban a las mujeres y se fue, y luego de una ratoestaría confundido por no haber aprovechado esa oportunidad que tenia y se puso a pensar y fue ahí cuando decidió…

Brama la tierra con mortal gemido.
La iglesia ya se estaba empezando a desmoronar, estaba muy gastada pero don Juan no la quería destruir pero habría alguien que se encargaría de eso, el mar; además de la iglesia el mar acabaría con toda Nueva Cádiz. Don Juan y Macopira estaban en laplaya cuando escucharon un sonido que los asusto ya que se oía que pedían ayuda; así que del susto salieron a correr y pasaron por las calles de Nueva Cádiz para subir al monte y cuando eso comenzó la inundación ya que vieron como el mar acabo con todo, cuando el agua del mar les llegaba a las rodillas Juan pensó en su sobrino Alonso y su nieto Gabriel y sobre la generación de mestizaje que...