El Tlc

Este es un sencillo homenaje a una mujer que ha sabido encarnar en su vida “el mandato de Jesús: anunciar el evangelio” en donde ese anuncio del evangelio ha sido desdela misma cuna de su familia en el hermano país mexicano, en obediencia a sus padres.
Desde su juventud en la búsqueda y aceptación al llamado a la vida religiosa, en lacomunidad de Dominicas de la Doctrina Cristiana. Desde su madurez en el servicio desinteresado y constante; y a lo largo de toda su vida hasta hoy.
Sor Ana María García, elobjetivo de este detalle es demostrarle cuanto la queremos y cuán importante es para muchas personas y comunidades en las cuales usted ha dejado huellas, huellas dedonación, de sacrificio, de servicio y de amor.
Muchos de nosotros en algún momento fuimos tocados por sus palabras, por sus gestos de generosidad, por su pobreza, por suabandono a la providencia. Para quienes hemos compartido y vivido con usted, quienes la conocemos sabemos que esto no es meloseria, ni palabrería, es fruto de una experienciasincera de vida.
Por eso hoy celebramos, hoy festejamos su vida y su entrega a Dios en los hermanos en esta bella congregación de la cual usted ha sabido optar por los“más pobres” que es lo que madre Leonor siempre ha resaltado. La congregación cuenta con un gran elemento y nosotros contamos con una amiga y compañera en el conocimiento ycaminar hacia Jesús, quien ha sido su motor y motivación para entregarse desinteresadamente a sus hermanos. Dios la bendiga siempre y la conserve con nosotros durantemuchísimo tiempo más.
A continuación conoceremos de parte de algunas personas conocidas, amigas, que compartieron con usted esta hermosa experiencia de servicio a Dios.