El tunel resumen

I al X
La historia inicia narrada por Juan Pablo Castel, confesando el asesinato de María Iribarne. Empieza con un monólogo acerca de lo que piensa de los hombres, y del tiempo. De cómo se suele creer que el presente es mejor que el pasado, por el simple hecho de que lo malo del pasado se olvida con el tiempo, no porque las cosas realmente mejoren. Y de cómo los criminales le hacen un favor almundo, al eliminar a personas que solo contaminan al mismo. Pues para él, la humanidad está llena de vanidad, de maldad, egoísmo. Castel decide comenzar a escribir la historia de su crimen, sin importarle que la gente piense que es por los mismos pecados que reclama, específicamente la Vanidad del hombre, pues se incluye dentro de los hombres y por lo mismo, comprende que peca de la misma manera.Pero la razón por la que escribe no es esa. En un principio, pensó en no dar las razones por lo que lo hacía, pero comprendiendo que quienes más leerán sus escritos serán los más curiosos en explicaciones, decide revelar que la sencilla razón es que alguien entienda el por qué del crimen cometido, aunque sea solo una persona, pues la única persona que sabe que podría entenderle, fue a quien mató.El protagonista conoció a María, su víctima, en un salón de pintura donde presentó un cuadro llamado “Maternidad”, en el año 1946. Su pintura, a pesar de tener una crítica de buena palabrería, no era más que eso: pura habla. Ninguno de los críticos había notado la parte más esencial de su obra, “una playa solitaria y una mujer que miraba el mar. Era una mujer que miraba como esperando algo, quizáalgún llamado apagado y distante.”
Nadie lo notó, excepto una sola persona, una joven desconocida que a diferencia del resto no miró el primer plano, si no que vio más allá. El protagonista la observó hasta que desapareció en la multitud, sintiéndose infeliz por ello. Volvió a su casa esa noche, nervioso y descontento. El hombre no hizo más que pensar en aquella mujer durante los siguientesmeses, mostrando los primeros dejos de su personalidad obsesiva.
Cuando al fin volvió a verla fue por pura casualidad, en medio de la calle. El hombre revela en sus pensamientos que se auto etiqueta de tímido, su fijación por inventar en su cabeza diferentes circunstancias donde encontrarla y cómo reaccionar, pero por la cualidad anteriormente nombrada no supo qué hacer en el momento.
Esperando alprincipio que fuese ella quien le hablara primero, finalmente la siguió hasta un edificio y le preguntó si aquel edificio era el correcto solo para entablar conversación, a lo que ella respondió afirmativamente. La muchacha se sonrojó, provocando que Castel suponiera al instante que aquello era porque le reconoció. Y no solo lo supuso, sino que además le preguntó, admitiendo que llevaba mesespensando en ella y al fin pudiendo preguntar el por qué había notado la ventanilla de su cuadro.
Castel, al ver la dudativa la muchacha, decidió marcharse, pero ella lo detuvo diciéndole que pensaba constantemente en su cuadro. La muchacha se echó a correr y el hombre al principio la siguió, sin embargo al instante comprendió que no era necesario. Esperó durante horas pensando que la jovendesconocida saldría del edificio pues debía trabajar ahí (en cada uno de los minutos que pasaba creaba nuevas teorías al respecto), pero esto no sucedió por lo que tuvo que volver a casa. Eso sí, al volver, decidió rápidamente ir nuevamente al mismo lugar al día siguiente para encontrarla.
Y lo hizo, al verla, la tomó del brazo bruscamente y la llevó a una plaza a hablar, sin que la muchacha hiciera muchaoposición al respecto más que decir un par de palabras.
Castel dijo que la necesitaba. Mucho, la necesitaba mucho. Repitió aquello un par de veces y hasta lo gritó, aunque ella dijera que no había razón para esto, él insistió.
Hablando de muchas cosas a la vez, intentó explicar su creencia de que ella podía entenderlo, podía ver lo que nadie más vio. La desesperanza en su cuadro. Siento un...