El Valor de educar

EL VALOR DE EDUCAR
Fernando Savater

CAPÍTULO I. El aprendizaje humano.
El ser humano es también un deber, la solidaridad es un rasgo propio de las personas muy humanas. Los humanos nacemos para la humanidad; la humanidad biológica necesita una confirmación por medio de nuestro propio esfuerzo y de la relación con otros humanos que nos contagien su humanidad. La condición humana es en parteespontaneidad natural pero también deliberación artificial: llegar a ser humano del todo es siempre un arte. A este proceso los antropólogos lo llaman Neotenia que significa plasticidad o disponibilidad juvenil pero también implica relaciones necesarias con otros seres humanos. El niño pasa por dos gestaciones: la primera en el útero materno y la segunda en la matriz social en que se cría,sometido a variadas determinaciones simbólicas (lenguaje) y técnicas de su cultura. Ser humano consiste en la vocación de compartir lo que ya sabemos entre todos, enseñando a los recién llegados al grupo cuanto deben conocer para hacerse   socialmente válidos. Enseñar es siempre enseñar al que no sabe, quien no indaga, constata y deplora la ignorancia ajena no puede ser maestro. La dialéctica delaprendizaje es lo que saben los que enseñan como lo que aún no saben los que deben aprender. El proceso educativo puede ser informal (padres o grupo social) o formal (maestro), efectuado por personas socialmente designadas para ello. La primera titulación requerida para poder enseñar es haber vivido. La supervivencia biológica del individuo justifica la cohesión familiar y ha sido la necesidad deeducar la causante de lazos sociales que van más allá del núcleo procreador, es entonces importante subrayar que   el amor posibilita y potencia el aprendizaje pero no puede sustituirlo, por lo tanto la humanidad es la compleja combinación de amor y pedagogía. Antes de ser educado no hay en el niño ninguna personalidad propia si no solo una serie de disposiciones biológicas y a través delaprendizaje se fraguará su identidad personal irrepetible. El hombre llega a serlo a través del aprendizaje. Pero ese aprendizaje humanizador tiene un rasgo distintivo que es lo que más cuenta en él. Lo propio del hombre es aprender de otros hombres y ser enseñado por ellos (vincularse con otras conciencias) El hecho de enseñar a nuestros semejantes y de aprender de ellos es más importante para elestablecimiento de nuestra humanidad que cualquiera de los conocimientos   concretos. La vida humana consiste en habitar un mundo en el que las cosas no sólo son lo que son si no lo que también significan, hay que entender a los significados como una forma mental que les damos los humanos para relacionarnos unos con otros por medio de ellos.
No es lo mismo procesar información que comprendersignificados, el significado es lo que ya no puedo inventar y puedo adquirir por medio de la capacidad de participar en la mente de los otros en que consiste mi propia existencia como ser mental. La verdadera educación no sólo consiste en enseñar a pensar sino también aprender a pensar sobre lo que se piensa y este momento reflexivo exige constatar nuestra pertenencia a una comunidad pensante. Todo puedeser privado o   inefable menos aquello que nos hace partícipes de un universo simbólico a lo que llamamos humanidad. El primer objetivo de la educación consiste en hacernos consientes de la realidad de nuestros semejantes, considerarlos sujetos protagonistas de su vida. El fundamento de la humanización efectiva de los humanos potenciales, siempre que a la noción de voluntad se le conceda su debidadimensión de participación en lo significativo. Nadie es sujeto en la soledad y el aislamiento, sino que siempre se es sujeto entre sujetos. La educación es la relevancia de los demás, de la condición humana como un concierto de complicidades irremediables.

CAPÍTULO II. Los contenidos de la enseñanza.
La genética nos predispone a llegar a ser humanos pero solo por medio de la educación y la...