El zorro: hombre, genio y rebelde

“El zorro: hombre, genio y rebelde”
Ensayo literario histórico
Mtro. Daniel Santos Alvarado contreras

Cuenta la historia de bronce,[1] que en la madrugada del 15 de septiembre de 1810, el cura de la población de Dolores, Don Miguel Hidalgo y Costilla convocó a los habitantes de su parroquia para que se levantaran en armas y se lanzaran a la lucha contra la opresión impuesta por elgobierno virreynal español. La crónica continúa con el inolvidable toque de las campanas para congregar a los habitantes del pequeño curato, seguido del grito: ¡Viva la virgen de Guadalupe y mueran los gachupines!, que lanzara el cura Hidalgo al tiempo que enarbolaba en la mano izquierda, un estandarte religioso con dicha imagen, dando inicio al movimiento por la Independencia de la entonces NuevaEspaña. Este hecho tiene una doble concepción, por un lado, se ha convertido en la imagen clásica representativa del inicio de la independencia, ícono a nivel mundial. Y por otro, ha trascendido generacionalmente como una verdad absoluta, inamovible, sin el menor rasgo de duda. Idolatrizando al cura hidalgo en las páginas de oro de la historia nacional mexicana. Sin embargo, a casi 200 años de losucedido, cuando se lee y se relee la historia nacional con un enfoque crítico-analítico, deja de ser verdad absoluta y acción única e inamovible. si existen algunas interrogantes sobre aquel episodio de la historiografía nacional, a saber son: ¿Cuáles fueron los motivos personales, sociales y políticos del presbítero que lo llevaron a tomar esa decisión?, ¿Cómo y cuánto influyó su vida socialfuera del ámbito clerical en su histórica actitud de patriota?, ¿Cuál era el objetivo de la rebelión que decidió encabezar?, ¿Por qué decidió ser, el principal enemigo de la corona española si gozaba de privilegios por ser representante católico?.
Sin duda, tales cuestionamientos encierran en sus respuestas datos e información cuyo conocimiento popular más allá del desprestigio odesvirtuación de la imagen del cura, permitirá resignificar el valor humano e histórico de un icono de la historia nacional mexicana. Para encontrar respuestas diferentes de las clásicas y con una sinceridad más cercana a la realidad, se hace necesario indagar a través de la contrahistoria: al hombre, al sabio y al rebelde que integraron la personalidad del llamado: Padre de la patria. He aquí, algunoselementos de la otra historia, contada por quienes han decidido urgar en la cara oculta de la moneda, sabedores que, como tal objeto, todo tiene dos versiones.
Miguel, el hombre, nació en la hacienda de Corralejo,[2] fue el segundo de los cinco hijos procreados por el matrimonio de Cristóbal Hidalgo y Ana María Gallaga; al ser bautizado se le nombró Miguel Gregorio Antonio Ignacio Hidalgo yCostilla Gallaga Mandarte y Villaseñor (Carrillo, 1972); su vida familiar se mantuvo dentro de las oportunidades permitidas a la gente de su origen por la sociedad peninsular novohispana, es decir, como todo criollo de clase media alta, con vida cómoda, economía suficiente y muchos beneficios sociales a excepción del acceso a cargos del gobierno.
De su crianza familiar heredo aficiones y hábitosfundamentales para su incursión en la historia; escuchar constantemente, el clavicordio de su padre, le inspiró en el dominio de la música que a la postre le serviría para organizar verbenas y reuniones populares donde ampliaría sus relaciones comunitarias al exponer su pensamiento social y su crítica incisiva sobre el estilo de vida esclavizante, injusta y racista (Taibo II, 2007) que se llevabaen las tierras de la Nueva España bajo el régimen virreinal. En otras palabras, sus habilidades cómo músico las encauzó hacia el uso de esos espacios para entablar charlas, pláticas, entrevistas y negociaciones con otros tantos criollos que compartían sus ideas. Baste como ejemplo, los años cuando prestaba sus servicios religiosos en Michoacán, donde parte de sus ingresos los destinó al...