Ellos

Universidad Industrial de Santander
Nombres:
Silvia Carolina Acuña Pinzón
Código: 2130908
Wendy Gamboa
Código:
Trabajo: Afecto en la obra Deleuziana en el libro Crítica y Clínica
Presentado a: Mario Palencia
El termino afecto en la obra Crítica y Clínica aparecer en la páginas 42, 50, 55, 77, 102 103, 104,156, 157, 171, 175, 196, 201, 203, 204, 207, 218, 219, 220, 221, 222, 223,226, 227, 228, 229 230, 233, 234, 235, 237.
Los afectos para Deleuze son devenires -relaciones de un cuerpo con otra cosa- que desbordan a aquellos que los experimentan y devienen otros.
Página 42
El balancín: causante del afecto, el personaje: el cuerpo, las percepciones se iban a pagando pero no en su totalidad aun protegía al personaje de los terceros eventuales, después de considerar lasopciones a favor, intenta sorprender al personaje, el personaje se muestra débil y la percepción se acerca a él, allí se revela como percepción de afección, es decir puro afecto. Es el tercer acto cinematográfico afecto o percepción de afección, muriendo así el movimiento del balancín o dando la muerte del personaje.

Página 50
Afecto: Arte
Parece que en Kant se oyera ya a Beethoven, Si el YOdeterminara la existencia, el tiempo es esta relación la cual la mente se afecta a sí misma, o la manera en la que estamos afectados interiormente.
Tiempo: afecto y forma inmutable
Afecto de uno mismo por sí mismo, cuando menos como la posibilidad formal de ser afectado por uno mismo. Surge allí como una forma de exterioridad entonces cabe la posibilidad de que sea interno y externo. Lainterioridad no es netamente lo interno en la mente, la exterioridad comporta tanta eminencia (espacio permanece interior a mi espíritu). el espíritu se representa a alguien distinto a mi respecto al tiempo.
Página 55
Será la Crítica del juicio como fundación del romanticismo. Ya no se trata de la estética de la Crítica de la razón pura, que consideraba losensible como una cualidad referible a un objeto en el espacio y en el tiempo; ya no de una lógica de lo sensible, ni siquiera de un nuevo logos que sería el tiempo. Es una estética de lo Bello y lo
Sublime, en la que lo sensible vale por sí mismo y se despliega en un pathos más allá de toda lógica, que captará el tiempo en su surgimiento, hasta incluso en la fuente de su hilo y de su vértigo. Ya nose trata
del Afecto de la Crítica de la razón pura, que refería el Mí mismo al Yo en una relación todavía regulada siguiendo el orden del tiempo, sino de un Pathos que les permite evolucionar libremente para formar extrañas
combinaciones como fuentes del tiempo, «formas arbitrarias de intuiciones posibles». Ya no es la determinación del Yo la que debe juntarse con la determinabilidad del Mímismo para constituir el conocimiento, ahora es la unidad indeterminada de todas las facultades (Alma) lo que nos hace penetrar en lo desconocido. En efecto, de lo que se trata en la Crítica del juicio es de cómo determinados fenómenos que van a definir lo Bello confieren al sentido
íntimo del tiempo una dimensión suplementaria autónoma, a la imaginación un poder de reflexión libre, al entendimientouna potencia conceptual infinita. Las diversas facultades entran en un acuerdo que
ya no viene determinado por ninguna de ellas, tanto más profundo
cuanto que ya no tiene regla, y que prueba un acuerdo espontáneo del
Mí mismo y el Yo bajo las condiciones de una Naturaleza bella.
Página 77
guar–[71]dianes de la sexualidad, porque mantienen la separación a
través de la cual se insinúa elnacimiento, y hacen que se alternen el
agua y la sangre, esquivando el punto mortal en el que todo se mezclaría
sin medida. Por lo tanto los gemelos son los amos de los flujos y de
su paso, de su alternancia y de su disyunción.47 Por este motivo necesita
el Apocalipsis mandarlos matar, y luego subirlos al cielo, no para
que el mundo pagano conozca su propia desmesura, sino para que la
mesura...