Enjambre De Ensueños: Aproximación A Una Estética De La Ensoñación En Julián Del Casal.

Un estudio etimológico de la palabra “gruta” puede servirnos de punto de anclaje para el desarrollo de nuestra exposición. Proveniente del verbo griego “Kriptein” (ocultar), matriz divina y ámbito de regeneración, la gruta halla su significado en la mitología griega, acentuándose también en el seno del Cristianismo, como refugio propio de milagros, eremitas, simulacros de prisión e incluso,espacios propicios para la devoción. Así pues “La gruta del ensueño”, última sección de Nieve, poemario de Julián del Casal publicado en 1892, se instituirá como ars poética estructurada a partir de un eje temático fundamental: el ensueño, y a partir de allí incluso, la devoción centrada en algunos intertextos culturales. En efecto, el ensueño le ofrecerá, a la sensibilidad hastiada del sujetopoético una operación estilística a través de la cual la ensoñación se volverá un dispositivo rector de un determinado (des)pliegue discursivo.
En un intento de realizar una recuperación de los lineamientos artísticos que incidieron en el desarrollo de lo que hemos dado en llamar “una estética de la ensoñación”, Casal abreva, en principio, en la heroicidad decadentista de Des Esseintes; y en especialen ese conato reivindicador del poder evocativo de lo artificial que se acentúa en la obra de este autor francés. En el capítulo XIV de A Rebours, el narrador nos comenta, en referencia a las actividades de su personaje, que “Evoca recuerdos de seres y de cosas que no ha conocido personalmente, y llega un momento en el que se evade violentamente de la cárcel de su siglo y vaga, con toda libertad,por otra época con la cual, como última ilusión, le parece que hubiera encontrado una mayor armonía” (Huysmans 2004: 319). En Casal, dicha evasión se traducirá, al decir de Ritvo, en un mecanismo de carácter dual, en relación con esa conceptualización del decadentismo que se proyecta en dos dimensiones altamente imbricadas: en el tiempo y en el espacio, es decir, nostalgia y exotismorespectivamente: “(…) la búsqueda de otra parte, de otro lugar, que será el de la vida verdadera; en el del tiempo, es la nostalgia, la reminiscencia y la añoranza (…)” (Huysmans 2006: 200). Ambos itinerarios, temporales y espaciales, se proyectarán en la poética de Casal de manera desigual: por un lado la búsqueda de un efugio al insularismo colonial se reducirá al deleite en su imposibilidad, como se observaen la lectura del poema “Nostalgias”. En un principio, el yo lírico exhibe una pretensión de cosmopolitismo: “Otras veces sólo ansío/ bogar en firme navío/ a existir/ en algún país remoto, / sin pensar en el ignoto/ porvenir”. Es decir, de alguna manera, lo que ya había señalado Monner Sans (1958: 90) al afirmar que “la propensión a evadirse de lo circundante” en Casal se erige en manifestaciónineluctable de “su imposible adaptación al medio social habanero o a cualquier otro medio social”. No obstante, en los últimos versos, se plasma la negación del desplazamiento hacia el polo del exotismo, tan caro a las elaboraciones poéticas modernistas: “Mas no parto. / Si partiera / al instante yo quisiera/ regresar.” En efecto, si bien se impugna todo tipo de viaje efectivo, se hace factibleasimismo una irrupción de la ya mencionada dimensión de lo nostálgico, vehiculizada en estados de ensoñación del sujeto lírico ante determinados objetos culturales y artísticos.
Un intertexto pictórico le otorga un inicio al recorrido a través de esta gruta de ensoñaciones: “Ante el retrato de Juana Samary” representa la mirada del sujeto poético, elemento estructurante de todo el poema, y laconsecuente relación con el objeto admirado, en este caso la obra del pintor Pierre Renoir dedicada a la famosa actriz francesa. Allí puede leerse: “Nunca te conocí, mas yo te he amado / y, en mis horas amargas de tristeza, / tu imagen ideal he contemplado / extasiándome en tu belleza.” En medio de un procedimiento ecfrástico que se distancia de la profundidad de los comprendidos en la sección “Mi...