ENSALLO DEL LELITO Y LA PENA
Después de leer la obra del Marques de Beccaria del delito y la pena, no se puede dejar de lado, el hecho de realizar diversas comparaciones que para la época de publicación de su obra fue adelantada a su tiempo y que a mi criterio puede considerarse una de las bases o antecedentes del establecimiento del Derecho Penal Moderno, pues a la fecha subsisten muchasinstituciones, así como tipos penales y criterios de la individualidad de la pena; de igual manera redacta de forma específica y por demás detallada, la situación del sistema penal de la época, describiéndolo de manera real, las formas de aplicación, así como las posturas de las partes en el proceso, tratando de concientizar su función para la comprobación y/o incomprobación de la responsabilidaddel delincuente, tratando de dejar al descubierto de manera cruda y real la sobrevivencia de los infortunados a la injusticia y la arbitrariedad, así como las formas de la burguesía como hasta nuestros días de sacar beneficios y privilegios, a costillas de la clase trabajadora, conductas que dada su posición de clase influyente, no son sujetas al reproche del derecho y son revestidas delegalidad. Tratando la obra de Beccaria, despertar la consciencia general para la aplicación de la ley por igual a todos los ciudadanos.
Analizando en su tratado las causas que justifican el establecimiento y nacimiento de los delitos y las penas, la forma en cómo se organizan los hombres con la finalidad de ceder un poco de su libertad a cambio de lograr la felicidad de cada uno. Lo quedesencadena en que solo las leyes pueden decretar las penas de los delitos, a través de un legislador, que representa toda la sociedad unida por el contrato social, no dejándose al libre albedrio de juez la interpretación, sino únicamente la aplicación de la pena al caso, previo agotamiento del debido proceso.
Mismo legislador que debe establecer una proporción entre los delitos y las penas en las quese graduasen desde la mayor hasta la menos dura, manifestando la necesidad de dividir a los delitos por su modo, por su especie, por su objeto y por sus grados, con lo cual se lograría establecer un freno en la comisión de delitos más graves, hallando su justificación en el hecho de la imposición de penas más severas a delitos más complejos, verbigracia no se puede castigar de igual manera al robosimple que al robo con violencia, es decir se empieza a matizar la concepción del delito y sus agravantes, concibiendo la necesidad de señalar la pena adecuada, por el daño causado, ya tratando de darle forma al delito por clases, basándose para dicho fin en la clasificación del mismo, por el daño que causan a la sociedad, al particular, los bienes o en el honor.
Estableciendo de algunamanera, los criterios de valoración para la eficacia del testimonio del testigo, el cual como hasta ahora, debe ser ajeno y no tener interés alguno sobre la litis o el proceso, es decir, el hecho de no tener ningún interés en mentir, la necesidad de tener por lo menos dos testigos, para acreditar la veracidad del hecho, no otorgando ninguna creencia al testigo en los delitos de palabras, por laposible mala interpretación del tono, el gesto, todo lo que precede y lo que sigue, en razón de la interpretación que dan los hombres a las mismas palabras, ya que por la apreciación de cada uno las mismas son alteradas y/o modificadas, compartiendo dicha percepción, ya que en dichos delitos, a mi criterio juega un papel importante el animus, así como el temperamento de cada persona, la condiciónsocial, cultural, entre otros factores que determinan la personalidad del individuo.
Realizando el autor, ya una clasificación de la eficacia de la prueba, reconociendo la existencia de la prueba perfecta e imperfecta, así como la utilización del interrogatorio, no dando cabida, como a la fecha a la existencia de las preguntas sugestivas, es decir, la prohibición de inducir a una...
Regístrate para leer el documento completo.