Ensayo analogía entre “ser y educar” (enrique martínez) y “el valor de educar” de fernando savater

ENSAYO ANALOGÍA ENTRE “SER Y EDUCAR” (ENRIQUE MARTÍNEZ) Y “EL VALOR DE EDUCAR” DE FERNANDO SAVATER

Este escrito se basa en el establecimiento de analogías entre dos obras que buscan analizar los problemas de la educación de hoy y proponen vías de solución, estas son: “Ser y educar” y “El valor de educar”. En esta revisión de textos resulta muy interesante es que en la primera obra, lasluces de la propuesta vienen desde Medioevo, más exactamente de la obra de Tomás de Aquino, y no por eso son menos precisas y aplicables a la realidad actual que las indicaciones dadas en la segunda obra, cuyo autor ha indagado en multitud de propuestas pedagógicas dadas a lo largo de la historia para emitir sus conceptos. Para empezar se enunciará lo relacionado con la crisis actual de laeducación, y a partir de allí se repasan las visiones de los dos autores, ilustrando la calidad de los análisis y su similitud; así como la manera en que se ve factible su uso inmediato en la labor educativa.

Primero que todo, de entre los elementos de crisis actual mencionados por ambos autores, sobresalen tres muy importantes que se pasa a desarrollar. Ellos son: 1) Los relativos a losfines de la educación, 2) Los relativos al papel de los padres en la educación de los hijos, 3) La infravaloración de la profesión docente.

1) Los relativos a los fines de la educación. Aquí el problema se resume en que la educación atiende a unos fines, así los profesores y los estudiantes estén o no conscientes de ello, y en la actualidad se ha perdido de vista cual será ese fin. Losencargados de la educación están sirviendo muchos a fines totalmente utilitaristas sin percatarse de que el verdadero sentido de educar está en poner en el centro al ser humano, de modo que la educación le sirva al hombre para vivir bien, para su plenitud y felicidad; en vez de servir el hombre para adoptar una educación que va sólo en función de un sistema productivo y económico. Está bienque la educación ha de servir para la integración en el mundo del trabajo, pero no debe ser ni el único fin, ni el primero; esto resulta en una práctica muy heterónoma, pues es poner al sujeto sólo a buscar agradar a una demanda comercial insaciable, en vez de ayudarle a ser más feliz e integral. Savater, expresa esa confusión acerca de los fines de la educación, citando a Juan CarlosTedesco, “la crisis de la educación ya no es lo que era: “No proviene de la deficiente forma en que la educación cumple con los objetivos sociales que tiene asignados, sino que, más grave aún, no sabemos qué finalidades debe cumplir y hacia donde efectivamente orientar sus acciones”. (1991, pág. 13). También afirma que “el proceso de enseñanza nunca es una mera transmisión de conocimientosobjetivos o de destrezas prácticas, sino que se acompaña de un ideal de vida y de un proyecto de sociedad” (1991, pág. 145).

Este desconcierto e inversión de valores en cuanto a los fines se confirma cuando hoy en día se pregunta a cualquier profesor promedio acerca de los fines de la educación: ¿para qué es la educación?, ¿por qué hay que educar?, y entonces se oyen gran cantidad de respuestasinmediatas, venidas en su mayoría de lo que sus directivos le han sugerido debe ser. Entre las respuestas más frecuentes en la educación pública bogotana está la inserción en el medio laboral, el ingreso a la universidad (también con el enfoque de inserción laboral); de otra parte hay voces que hablan de la formación de sujetos éticos, socialmente responsables, llenos de valores. Sinembargo, las acciones tomadas en las Instituciones van más encaminadas al tema laboral, puesto que los requisitos legales y las evaluaciones externas, que son en últimas las que validan a los centros educativos, imponen una presión y una urgencia bien difíciles de manejar.

Pero entonces ¿qué hacer? Bueno, Enrique Martínez en su obra, recuerda como Santo Tomás llegó a discernir un orden en...