ensayo de EXHORTACIÓN APOSTÓLICA EVANGELII GAUDIUM

 EXHORTACIÓN APOSTÓLICA
EVANGELII GAUDIUM
El articulo habla de cómo el evangelio llena los corazón de las personas que lo siguen y están más llenas de Dios y son liberadas del pecado de la tristeza del vacío interior y del aislamiento y como el papa san francisco nos invita a acercarnos a dios ya su palabra evangelizadora, nosotros los hombres a veces somos muy superficiales y no ponemos atención a lo que Dios nos quiere decir estamos tan enfocados en notros mismos y a las superficialidades que no nos damos cuenta que hay muchas personas que necesitan de nuestro servicio ya no nos entusiasma hacer el bien y ayudar al prójimo debemos abrir los ojos y renovar nuestro encuentro conJesucristo intentarlo día con día todos y cada uno de nosotros porque nadie está excluido de la alegría reportada por el señor cuando damos un paso hacia Jesús nos damos cuenta que siempre nos estuvo esperando porque es lo que Jesús espera que nos convirtamos en él, en hombres de bien, aun mas si estamos alejados de Dios tenemos que renovar nuestra alianza con él. Porque Dios nunca nunca se cansa deperdonar nosotros nos cansamos de acudir a él y a su misericordia, Dios nos quiere con él y quiere que seamos felices con el por qué la ausencia de Dios es lo que nos causa la tristeza, el dolor y el sufrimiento. Dios es alegría “Dios está en medio de ti, poderoso salvador. Él exulta de gozo por ti, te renueva con su amor, y baila por ti con gritos de júbilo.” Solo depende de nosotros ser felices, ysi queremos ser felices debemos buscar a Dios . A veces nosotros podemos pasar por situaciones duras y llenas de sufrimiento pero debemos tener fe, que la alegría de la fe se despierte en nosotros mismos y en la memoria debemos tener que Dios nos traerá algún día felicidad, Muchas veces la sociedad nos ha confundido haciendo pasar al placer por alegría, ay es donde entran las tentaciones porquepodemos creer que estamos felices pero que son solo placeres pasajeros que la mayoría de la veces no dejan nada bueno y que a pesar de que se sientan bien tarde o temprano nos van a hacer sentir muy mal y no podemos ver la genuina alegría que nos brinda Dios siendo sencillos, serviciales, llenos de fe y de corazón creyente, tenemos que comenzar a descubrirnos con Dios porque lo necesitamos ynecesitamos acercarnos más a él y porque sólo gracias a ese encuentro con el amor de Dios, que se convierte en feliz amistad, somos rescatados de nuestra conciencia aislada y de la autor referencialidad. Llegamos a ser plenamente humanos cuando somos más que humanos, cuando le permitimos a Dios que nos lleve más allá de nosotros mismos para alcanzar nuestro ser más verdadero. Allí está el manantialde la acción evangelizadora. Porque, si alguien ha acogido ese amor que le devuelve el sentido de la vida, ¿cómo puede contener el deseo de comunicarlo a otros?
Las cosas buenas siempre tienden a comunicarse obviamente si uno es bueno y siente una felicidad que le llena va a querer esparcirla para que el prójimo también sea feliz al igual que el, siempre debemos buscar nuestra felicidad y la delos demás proclamando la palabra de Dios «¡Ay de mí si no anunciara el Evangelio!» (1 Co 9,16). La vida de acredita dándola y poniéndola al servicio de los demás y se debilita en el aislamiento, por eso Cuando la Iglesia convoca a la tarea evangelizadora, no hace más que indicar a los cristianos el verdadero dinamismo de la realización personal: «Aquí descubrimos otra ley profunda de la realidad:que la vida se alcanza y madura a medida que se la entrega para dar vida a los otros. Eso es en definitiva la misión» Por lo tanto, un evangelizador no debería tener permanentemente cara de funeral. Recobremos y acrecentemos el fervor, la dulce y confortadora alegría de evangelizar nos causa dicha, haciendo de que los demás se conviertan en personas con Dios y de bien, y así recibir la Buena...