ENSAYO DESIGUALDAD

Determinantes sociales de la salud: un ensayo ético político.

Rafael González Guzmán, Juan José García García
Departamento de Salud Pública, Facultad de Medicina
Universidad Nacional Autónoma de México

Resumen

El presente ensayo forma parte de una línea de investigación sobre la dimensión ética en el campo de la determinación social de la salud y en la definición de políticas desalud. Se presenta en una primera parte una propuesta de marco conceptual para explicar las relaciones entre las desigualdades sociales, la inequidad, la injusticia y la salud. Posteriormente se examinan de manera resumida tres enfoques en políticas de salud y su postura en el campo de la equidad social y su relación con la salud.

1.- la desigualdad social y la propiedad privada.

El humano esuna de las especies que actúan colectivamente para obtener los medios necesarios para mantener y reproducir su vida. Nos mueve la necesidad y lo posibilitan varias de nuestras características y potencialidades, particularmente la inteligencia para comprender el mundo y la capacidad de crear instrumentos de trabajo y un lenguaje con una gramática infinita . Con ambas propiedades desarrolladas laspoblaciones humanas van mas allá de ser una mera colección de individuos que suman sus acciones y resultados trascendiendo a establecer relaciones de cooperación que multiplican los medios de vida obtenidos.
No somos los únicos que hacemos esto. La afirmación de Darwin en el sentido de que las diferencias entre humanos y otros animales son sólo de grado aplica también a la cooperación. Se haencontrado en experimentos que monos capuchinos (Cebus apella) llegan a entender que la colaboración da mas frutos que la suma de productos de actividades realizadas por separado y que al hacer trabajo colaborativo tienden a compartir mejor los frutos obtenidos. Desarrollan así conductas que los investigadores señalan como repercusión de actitudes de mutua ‘gratitud’ . De manera espontánea loschimpancés desarrollan actividad colaborativa a la que se une una limitada repartición mutua.
Sin embargo, en el caso de los humanos, se observa con mucha mayor intensidad una tendencia a realizar trabajo colaborativo y que esto tiende a entrelazarse con una distribución equitativa, a la que incluso se agrega surtir depósitos para que de ellos tomen los otros miembros del grupo. Así, en experimentoscon niños de pequeña edad se ha encontrado que tienden con más frecuencia a una distribución equitativa cuando los bienes a distribuirse han sido obtenidos mediante una acción colaborativa.4
Sin embargo, si bien la colaboración entre humanos tiene un sustento biológico, las relaciones establecidas entre nosotros en el trabajo, nunca han sido “naturales”, sino sociales, es decir, están articuladasy determinadas por características no reducibles a la acción de tales o cuales rasgos biológicos o supuestos genes “egoístas” o “altruistas”. O sea, de la organización social para el trabajo colaborativo surgen un conjunto de nuevas propiedades de relación y de representación mental y cultural que derivan de ésta y evolucionan con ella en función de sus contradicciones y potencialidades.
Así, delas características y tendencias naturales del humano surge la comunidad inicial de trabajos y bienes producidos, como primera forma de la organización social. La historia humana inicia cuando, como producto de su actividad, las personas crean nuevas necesidades y por tanto actividades y medios para satisfacerlas. Según esta idea las distintas formas de organizarse de la sociedad están ligadas alas formas que asume la cooperación de las personas que participan en y se dividen el trabajo, y las formas en las que se distribuyen los bienes. Sobre la base del trabajo colaborativo y las formas de distribución surgen distintas formas de cultura, entendida esta en el sentido de conjunto de sistemas de significados y valores atribuidos a las prácticas sociales.
Las formas de organización...