Ensayo Hervey Angel

Henry estaba confundido por la tia ágata pues después de la llegada de Harvey ángel a vivir ahí estaba rara ósea feliz muy feliz cosa que era muy rara en la tal agazapes siempre fue una mujer muy fría y ahora ya no ahora era escalofriantemente feliz.
La tia ágata había sido cargada por las energías espirituales que Harvey hacia o sacaba de los muertos ya que el decía que podía levantar a losmuertos cargándolos de energías.
Pues el decía que era un electricista usaba desarmadores con mangos de colores y recordó Henry que llego a ver al señor parkings en el panteón a media noche bailando como loco y heavy estaba ahí haciendo sus experimentos.
Tal ve cargo demasiado a la tia ágata, al señor parkings y a la señorita skivy y muguins.
Después la tia ágata compro un viejo auto ya casidesbaratándose solo compro una lata de aerosol y lo pinto de rosa un tono de ese fosforescente que wao.
Lo conducía por la ciudad tal cual como tocaba su piano alocadamente y con el pie hasta el fondo del acelerador y con una sinfonía de batojen de claxon ella decía que quería que todo el mundo se diera cuenta de que ella iba ahí pero con su forma de conducir pues bastaba y con su gran claxon haciacorrer del camino a quien se le cruzara en el camino.
Ella todos los viernes sacaba su piano a empujones y en la banqueta se ponía a tocar por toda la tarde.
la tia ágata solía ir a las ventas de garaje a comprarle ropa a Henry pero nunca atinaba a las tallas y gustos de Henry pues a veces le llevaba pantalones demasiado largos o demasiado cortos o avises demasiado apretados o demasiadobombachos. O suéteres cuadrados o suéteres tejidos al parecer como por un daltónico psis eran de colores muy extravagantes a ella le encantaba sumergirse en las montañas de ropa usada.
A Henry lo caracterizaban por ser toda una rareza sin amigos que no tenía un par de tenis.
Cuando Henry se miraba al espejo, no veía sus ojos de un color marrón cálido ni su sonrisa amigable solo veía lo que pensaba quelos demás decían una rareza para empeorar las cosas la tia ágata en su estado de felicidad empezó a escarbar en el montón de ropa cada ves con mayor entusiasmo con orgullo traía a casa camisetas y suéteres.
Y por si no fuera poco también las señoritas sibí y muguins quienes antes de la visita de Harvey ángel habían sido 2 tímidas y adorables.
Habían dejado de serlo la señorita muguins se habíaafiliado a la sociedad ópera del pueblo ensayaba la pin afore de HMS sobre todo cuando Henry intentaba dormir.
En cuanto a la señorita skivy quien por trabajar en la oficina de correos tantos años había acabado pareciéndose a un paquete de3 pape marrón se había jubilado y emprendió una distribución de sándwiches a los pobres en patineta.
A los días la tia ágata hablo con Henry el señor parkingsy las señoritas skivy y muguins que juntarían el dinero suficiente para irse de vacaciones al mar.
En esos momentos ha Henry le daba un vuelco al corazón por que en todos esos años desde que sus padres murieron y vivía con su tia nunca había ido de vacaciones y no conocía el mar.

El nivel de energía del propio Henry se disparo como el mercurio de un termómetro.

En ocasiones Henry seinstalaba en la bañera a practicar su brazada de torso mientras murmuraba océano sin limites y las preguntas excavadas por la ola y el ritmo lo hacia sentir como si estuviera en una lancha.

Luego ponía a flotar unas cuantas esponjas en la tina y se imaginaba que era el mar de las medusas. Soñar con el mar era una especie de escape de su soledad.

La tia ágata tenia una diferente pensar en el mar sepasaba las tardes contando el dinero recolectado en las latas y establecido a lo que llamaba su presupuesto de vacaciones.

No había quien moviera de su presupuesto, escribía todo lo que pensaba que podía comprar.

Depuse que llegaron los 5 estaban en silencio en el auto viejo rosa de la tia ágata y mientras las olas se enfrentaban sobre dique como zarpas de león el viento media y estremecía...