ensayo lo que esta en juego en colombia
Pinturas de Beatriz González, de la serie «Uno sobre quinientos».
En el siglo XVI, el territorio de lo que hoy es Colombia vivió, como el resto del continente, pero de modo especialmente severo, las guerras del oro. Poderosos ejércitos europeos de ocupación arrebataron a los pueblos nativos todo el oro elaborado de sus santuarios, de sus casas y de sus ornamentospersonales, y después sondearon en las venas de la tierra y explotaron mediante el trabajo de los indios y de los esclavos traídos de África, el oro de las minas. Por los mismos tiempos, en Cumaná y en el cabo de la Vela, se vivió la guerra de las perlas, en la cual fueron sacrificados decenas de miles de seres humanos. Estaba esa guerra en su plenitud cuando una región remota del territorio vivió laguerra de la canela: la expedición de Gonzalo Pizarro había remontado violentamente con sus tropas y con miles de siervos indígenas las cumbres nevadas de Quito, buscando unos legendarios bosques de caneleros que no aparecieron jamás. En esos mismos tiempos, el valiente y cruel Pedro de Ursúa libró cuatro guerras feroces: una contra los panches, en el país de montañas azules de Neyva; otra contra losmuzos, en el país de las esmeraldas; otra contra los chitareros, en los páramos de Pamplona hasta el cañón del Chicamocha, y otra contra los tayronas, en el país de ciudades de piedra de la Sierra Nevada de Santa Marta. En aquel tiempo estas tierras fueron escenario de algunos episodios centrales de la historia occidental, y epicentro de los grandes mitos de la época: el país del Oro, el país delas Perlas, el país de la Canela, el país de las Amazonas.
La Colonia fue una época de crueldades y de injusticias, pero no hubo en ella grandes conflictos armados, sino una sola sombra larga: la extenuación de siervos en las encomiendas y de esclavos en minas, campos de algodón y planicies de caña de azúcar. Los choques armados reaparecieron cuando se libró la guerra de Independencia, queenfrentó a los criollos con los españoles. Esa guerra supuso también un reorde-namiento de los mercados, una redistri-bución de las influencias de las grandes metrópolis, y contó con la colaboración eficaz de los franceses y los ingleses, interesados en abrir nuevos horizontes para sus mercaderías. Así, con el discurso de la Revolución Francesa, de la división de los poderes públicos, las nuevasrepúblicas inspiradas en el pensamiento de la Ilustración abrieron camino al libre cambio, al comercio de maderas, de quina y de tabaco, a las promesas de la modernidad. Y de allí nacieron otros conflictos: conflictos mercantiles entre artesanos proteccionistas y comerciantes librecambistas; políticos, entre federalistas y centralistas; económicos, entre defensores de la esclavitud y abolicionistas. Entreestos últimos se libraron varias guerras, hasta el triunfo precario, pero significativo, de la abolición.
La primera riqueza nacional que no parece haber producido una guerra de inmediato fue el café. Pero ello se debió a que el territorio necesario para esa economía había sido previamente despoblado por la Conquista y abandonado después, hasta comienzos de la República, a las inercias de lanaturaleza, hasta que oleadas de colonizadores antioqueños y caucanos del siglo XIX prepararon con hachas y con incendios el terreno donde habrían de ordenarse los cafetales. Con el final del siglo XIX, la guerra de los Mil Días, cuyas causas fueron a la vez la disputa por la tierra y las nuevas pautas de modernización, terminó precipitando el zarpazo imperialista sobre el territorio donde seconstruiría el más importante canal interoceánico del hemisferio occidental. No había cicatrizado el país de la secesión del istmo de Panamá, cuando empezaron las crueles guerras del caucho, consecuencia de la invención del automóvil y de la desaforada demanda de materia prima para neumáticos por parte de la industria naciente. Vino después la guerra de la industrialización, que se manifestó sobre...
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