Ensayo sida

SIDA
¿Nos informamos o Discriminamos?
Por: Camila Hernández
Estudiante Técnico Jurídico
AIEP

Han transcurrido casi tres décadas que sucedióla primera muerte producto del SIDA (Síndrome de inmunodeficiencia adquirida) Y quiero partir contando la historia de un matrimonio de amigos, los cuales tenían una relación maravillosa, de mucho amor, conformando una familia normal y constituida para nuestra sociedad conservadora. Él, una persona reconocida por su trabajo, en una ciudad pequeña, al sur de nuestro país, producto de unaoperación, la cual tuvo ciertas complejidades, le realizaron transfusión, algo relativamente habitual, el problema fue que la negligencia en la que cayó el profesional(es) al momento de realizarla, cambio la realidad de él, de su señora, sus hijos, su familia y entorno, para el resto de sus días.
Al momento de traspasarle “vida”, firmaron su sentencia de muerte, lo contagiaron con SIDA.
Saber su nuevodiagnostico, interiorizarlo, que su mujer lo supiera, lo comprendiera, sacara sus prejuicios (inclusive entendiendo que no fue producto de una infidelidad), fue sumamente difícil, esconder la información real de su enfermedad extraña, desconocida y temida, ya que al ser una persona muy conocida por su trabajo y esta tan discriminada por la sociedad, lo llevaron a enfrentar momentos muy duros, y lopeor de todos en sus últimos días.
Fue así como vivió tristes y dolorosos 10 años, en donde enfrento la invasión letal de este virus bombardeando todo su cuerpo, pasando en total más de la mitad de todos estos años encerrado en hospitales, muchas veces lejos de los suyos, viviendo de cerca como este síndrome asesino finalizaba con la vida de otras personas, casi como preparándolo para cuandosucediera con él, y peor aún, solo pocos sabiendo realmente lo que sucedía, ya que ni a sus hijos los podía mirar a la cara y hablarles con la sinceridad que correspondía.
Tener que llevar en el peso de su conciencia todo el dolor que le significaba a su compañera de vida, acarreándole la responsabilidad de que ella tuviese que tener detalles tan importantes como por ejemplo que sus hijos varonesnunca ocuparan la máquina de afeitar de su padre, cuando ellos recién comenzaban la etapa de su adolescencia, y saber, que en el momento que no abriera sus ojos más, ella fuera los suficientemente fuerte para pararse, acurrucar a sus hijos y seguir negando la realidad, para que el día de mañana no fueran apuntados con el dedo por esta sociedad critica, prejuiciosa y poco informada de lo querealmente es el SIDA.

¿Desde cuándo nos crean una realidad discriminativa y temerosa a través de la comunicación?
Responderé esta pregunta, citando al Padre Raúl Hasbún, el cual en el diario La Tercera en agosto de 1984 dijo:
“Suena como una trágica ironía: contemporáneamente al intento de restringir nuevas importaciones de cobre a los EE.UU, se anuncia la primera remesa de un producto importado deprocedencia y factura muy probablemente norteamericana. Se trata del Sida, el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida. El impacto mayor se experimenta en las conciencias mismas de los homosexuales, urgida a reformular sus prácticas y eventualmente sus convicciones en tal delicadas materias. Hay un dato escalofriante: cada víctima del Sida por esta vía han tenido relaciones sexuales con 40 parejasdiferentes en los últimos 12 meses. La homosexualidad objetivamente es un desorden de la sexualidad humana.”(1)
He aquí como vemos la sentencia de esta enfermedad en manos de uno de los representantes de la Iglesia Católica, con una irresponsabilidad tremenda,

(1) Padre Raúl Hasbún, Diario La Tercera, Agosto de 1984.

Ya que ni siquiera muestra un ánimo de querer informarse antes de proclamar...