ensayo

¿El qué o el quién?

¿Importa más el autor, o la obra? Remontémonos a la Edad Media donde las obras de artes estaban concebidas para la comunidad (la mayoría en alabanzas a dios), pero estas no eran firmadas, los creadores (los autores) no tenían como objetivo lograr su propio mérito sino más bien que sea consagrado y visto por toda la comunidad. Con el surgimiento del Renacimiento las firmasanónimas terminan y aparece el concepto de autor dejando de  lado el artesano anónimo para hablar ahora de artistas que firman sus obras. La reputación adquirida por muchos artistas y la alta demanda de sus trabajos concedió mayor importancia a su firma. La firma en el arte no sólo se produce como un mecanismo de diferenciación entre los artistas y sus trabajos sino que es el documento quecomprueba la originalidad, no de la obra, sino de su autor y con esto la justificación de su precio. Estamos de acuerdo que el autor tiene que sacar recompensa, prestigio de su creación, ¿Pero que el nombre, la firma pese más que la obra en sí? Está naturalizado que en la vida cotidiana estemos diciendo todo el tiempo, a no si lo hizo tal debe ser genial, o vayamos a ver esa obra porque el autor esmagnífico y tenemos terror a ver espectáculos, obras y películas independientes, que a veces pueden ser mejores.
No estamos desprestigiando obras de autores reconocidos, pero si que podamos pensar en  darle mayor valor al “producto” al contenido de la obra, porque suele resultar común que cuando los autores alcanzan el reconocimiento y el poder adquisitivo, se vuelven dependientes del poder económico yya no se preocupan tanto en lo que crean, sino más bien en si van a vender o no. La firma en el arte, en tiempos contemporáneos ha ampliado la separación del arte con las clases sociales menos favorecidas, dejando a la mayor parte de la población con la imposibilidad de apreciar las obras artísticas ya que cada vez  es más caro adquirir algo de ellas, tanto obras plásticas, teatrales ycinematográficas. Por lo tanto la firma, aliada al sistema capitalista remarca la brecha entre las clases sociales y evita la democratización de los bienes culturales.  Su figura determina en el mundo “Donde todo es Arte” que es o no es arte y habilita a individuos como críticos y dueños de salas de exposición a tener un control sobre los medios de expresión artísticos  y serán ellos quienes legitimen qué ocuáles firmas son valiosas y de interés en el mercado.
Fijémonos en el arte callejero, los grafitis o murales que están en las calles. Es arte anónimo que pretende otro tipo de mensaje, no tiene ánimo de lucro ni tampoco el autor quiere lograr un mérito, es el producto del  acontecimiento artístico lo que toma mayor relevancia, la obra despojada del autor pasa a un primer plano y se entrega enuna profunda intimidad con su espectador, que no es uno sino miles. Al romper la atadura de la firma el arte deja de ser “De” y pasa a ser de todos.
Situémonos en Alemania, precisamente en Berlín y más aún en el famoso Muro de Berlín, donde en la actualidad este muro está totalmente impregnado por diferentes huellas de artistas, que dejaron grafitis, murales pero sin dejar sus firmas (sólo algunoslo hicieron). Acá se ve verdaderamente el mensaje que quiere dejar el anonimato donde establece un diálogo con el público, invitándolo a reflexionar a participar y a discutir sobre determinados temas. El anonimato habilita a que ese diálogo pueda darse entre la obra y el espectador, porque no hay un creador, no hay alguien que dice lo que debemos ver, la obra sola se muestra y el creador es unomás. El mensaje que trae no pretende imponerse sino entrar en discusión, REFLEXIONAR.
Un ejemplo claro en el que podemos ver que el “arte se volvió mercenario” o mejor dicho “la firma: el autor es lo importante, tiene que ser reconocido” es lo que ocurrió en Enero del 2007  en los subtes de de EE.UU en la ciudad de Washington, un joven vestido con una remera de mangas largas, jeans y usando una...