Ensayo

LOS DAMNIFICADOS DEL CAPITALISMO
Por Ález Arango/Utopía la palabra

El dolor, el llanto, la muerte. El poderoso alúd de tierra sobre las casas y todos desaparecen, han quedado enterrados, niños, niñas, mujeres, ancianos, hombres. Miles anegados entre el agua. Avalanchas, ríos que se desbordan, pueblos y aldeas inundados…rostros entristecidos, mujeres abrazando a sus hijos como aferrándose a loúltimo. La gente en los albergues, hacinados, sin nada. Es la Colombia llegada al 2011, es la Colombia acorralada por símbolos de invierno. Pobreza por todas partes, hambre, desnutrición, falta de techo. Les dicen damnificados por el invierno. A ellos, a los pobres de siempre, a los proletarios y campesinos de este país, damnificados desde siempre, desde hace quinientos años, muchos de ellos susancestros fueron secuestrados en Africa, despojados de todo, hasta de sí mismos, otros, sus ascendientes fueron exterminados y sus culturas saqueadas, sus tierras envilecidas y arrebatadas, y mas reciente aún, miles de desplazados que desde finales de los años cuarenta del siglo veinte huían de las aldeas y los campos a las grandes ciudades para escapar de la muerte organizada por el poder quefavorecía la acumulación de tierras en manos de terratenientes que financiaban organizaciones criminales que garantizaban la expoliación de los campesinos por la violencia, matanzas, asesinatos, persecusiones indecibles, terror. Este ha sido el invierno perpetuo de Colombia. Y los que sufren son los de abajo, los proletarios, los pobres, los campesinos despojados. La burguesía se impone por laviolencia, el capitalismo por la muerte. Asi señores, no es el invierno el origen de la tragedia. Es el capitalismo, la dominación neocolonial, la causante de este horror, de esta depredación sin límites de lo natural y de lo humano. Los pequeños cultivos se han perdido entre las charcas, las casa se han inundado, los barrios pobres y marginales de las grandes ciudades se han derrumbado, y es ahí dondeviven los proletarios, los desempleados, los precarios, en casas insalubres y pobres, sin servicios, sin obras de alcantarillados, en las peores condiciones. El invierno llega a todas partes pero los que sufren son los de abajo, en cambio los burgueses, la clase dirigente que baila al son de su danza guerrera y mantiene en alto su culto por la muerte no es la afectada porque si sus grandeshaciendas y extensiones de cultivo se perdieron recibirán oportunamente los créditos y los subsidios del gobierno nacional a través de la emergencia económica, a ellos irán a parar los dineros de la teletón y las colectas de la iglesia católica recibidas en la cuenta bancaria de la pastoral social. Ellos ganan, los pobres, los proletarios pierden. La tragedia es una oportunidad para que la clasedirigente haga negocios, nuevos planes de vivienda, diseños y proyectos de reubicación de los marginados hacia otra marginación, especulación generalizada, baja de salarios, aumento del tiempo de trabajo y mayor explotación, mayor ganancia, mayor plus valía, y sigue el engranaje, el estuche del régimen y su maquina de muerte.

La penuria de la vivienda en esta sociedad, lo dijo Federico Engels, hace masde ciento treinta años, no es en modo alguno producto del azar, y en el azar incluímos los terremotos y el invierno. Algunos, que han olvidado el marxismo, vienen afirmando que es el desquite de la naturaleza, y si asi fuera ¿por qué entonces contra los proletarios y los pobres del campo y la ciudad? Pero no es así, “es una institución necesaria que no podrá desaparecer, con sus repercusionessobre la salud, etc., más que cuando todo el orden social que la ha hecho nacer sea transformado de raíz. Pero esto no tiene por qué saberlo el socialismo burgués. No se atreve en modo alguno a explicar la penuria de la vivienda por razón de las condiciones actuales. No le queda, pues, otra manera de explicarla que por medio de sermones sobre la maldad de los hombres, o por decirlo así, por medio...