Ensayo
TEMA:
RECUPERACION
TRABAJO PRESENTADO POR:
LIZEHT VANESSA MILLAN HRRERA
PRESENTADO A:
ANA TERESA BETANCUR
INSTITUCIÓN EDUCATIVA JUANPABLO II
CURSO ONCE-DOS
CALI, 26 JULIO 2012
LITERATURA NORTEAMERICANA CONTEMPORÁNEA
Poco a poco, en los «años veinte» vemos aparecer en la prosa norteamericana un nuevo sentido de las posibilidades artísticas de la expresión, sinperder el enlace con la coherencia narrativa del siglo XIX. Mucho influyó, en el primer aspecto, la parisiense adoptiva Gertrudis Stein (1874-1946), que fue para los Narradores algo parecido a lo que fue Pound para los poetas, una experimentadora radical. Gertrudis Stein se Complacía en describir la realidad por una suerte de acumulación de instantes y superficies potenciadas al máximo.
Nosiempre, sin embargo, se dedicaba la Stein a desmontar el juguete de la prosa, y su libro más Conocido es una autobiografía indirecta, es decir, una ficticia autobiografía de su inseparable amiga Alice Toklas.
Estos esfuerzos técnicos venían muy bien para salvar la prosa norteamericana de la atonía, dándole Valor poético; uno de los más adictos discípulos de Gertrudis Stein fue Ernesto Hemingway, cuyasencillez nos Hará comprender cuál era la verdadera meta de estas investigaciones estilísticas aparentemente Complacedoras. Pero hay también otra línea más castiza en la depuración de la prosa: Sherwood Anderson (1876-1940), en sus cuentos, especialmente en los de Winesburg, Ohio, da una nueva vida a este género de Una manera aparentemente conservadora. La descripción de la pequeña ciudad através de tipos y casos, sin Verdadera intención argumental, está hecha con sencillez clásica: casi podríamos creer que se trata de un Autor —y de una ciudad— del siglo XIX si no fuera por una admirable economía en los medios, que Transciende incluso los motivos banales, y que ha hecho de él un maestro, más o menos secreto, de los Principales narradores subsiguientes. El mismo fue consciente de supapel de segundo plano, pero decisivo.
Todavía más castizos, hasta rayar en localistas, son, por ejemplo, Damon Runyon (1880-1946), cuyos Cuentos del hampa llegan a cansar por la repetición del tono confianzudo que quiere ser coloquial, y Ring Lardner (1885-1933), un cronista de deportes que en ocasiones alcanzó auténtico valor literario. El tono Novelístico de los gay twenties, los «alegres añosveinte», tiene su encarnación más positiva en Ernesto Hemingway (1899-1961), que en lo mejor de su ulterior producción ha conservado el tono sencillo, Deportivo y a punto de superficial que caracterizó sus primeras obras, como los cuentos En nuestro tiempo (In oír time, 1923), Fiesta (título que se ha dado a la traducción de The sun alzo rices, 1926), los relatos Hombres sin mujeres (Menwithout women, 1927), Adiós a las armas (Afarewell tú armas, 1929) y Muerte en La tarde (Death in the esternón, 1932). La modalidad básica de Hemingway es su sencillez eficaz de estilo que, como él mismo ha contado, se basa en un decálogo estilístico que aprendió en la redacción del Periódico Kansas City Star, y que se resume en el mandamiento de la economía expresiva: con su templado instrumentoestilístico, Hemingway nos presenta emociones simples y elementales, el amor físico, la guerra, la caza y la pesca, el peligro (de ahí su afición a los toros). Por lo demás, sus personajes se sienten cohibidos en cuanto se trata de dar profundidad a la acción, y se refugian en la bebida —el vaso es el principal signo de Puntuación de Hemingway—, tras de cuyo escudo lanzan gallardos desplantes contralas «superestructuras» intelectuales o caen en banalidades de bar. Por quién doblan las campanas (Foro won the Bell tolls, 1940) se animó con el ambiente de la guerra española, vista como corrida humana y juego de gallardía y crueldad, sin Programa ismos de interpretación ideológica. Después, tras el relativo fracaso de Tras el río y bajo los árboles (Acrosas the river and andar the tres, 1950),...
Regístrate para leer el documento completo.