Ensayo

"...quien no sepa darse cuenta de la historia
tres milenios vivirá sin experiencia"
Goethe

No es la ignorancia la suma de todas nuestras incapacidades, la responsabilidad debe distribuirse antetodo y todos. Mi nación ha estado subyugada desde antaño, por una religión impuesta por los conquistadores o por el mundo del poder. Es un hecho, definitivo, indiscutible; pero, queda algo por hacer.Pareciera que no, sin alternativa nos sentamos a ver el televisor y, sintonizando nuestro muy malversado noticiario preferido, somos testigos de cómo Los Hombres de Traje toman posesión de lospapeles principales, bajan de la Torre Negra y, sin pudor ni rostros a contraluz, emergen, terroríficos profetas, a infundir una edad de pánico y desesperanza, de desnacionalización. Antes, cuando estoscaballeros comenzaban a experimentar con el Poder de la Información, utilizaban títeres; me sirvo de un ejemplo para ilustrar: El muy tierno Juan Pablo II, el papa viajero; ¿a qué mente tan mássiniestra y oscura, pregunto yo, se le pudo ocurrir una estrategia tan malévola? Era un actor quien realizó su más insuperable papel, hacerse pasar por un viejito tierno. Pero alguien estaba tras de él, losHombres de Traje. Hoy, uno de ellos, El Oscuro Monseñor Ratzinger, ocupa, ya sin esconderse, su puesto. No puedo ni imaginarme las asquerosas intrigas cardenalicias dentro de la curia vaticana,seguramente Benedicto XVI, como todo un perverso jerarca renacentista, almacena veneno en el interior de sus anillos huecos espolvoreándolo sobre el coñac de sus adversarios. ¡Indiscutiblemente malvado!,pero no tanto como el Reality Show de ese pobre anciano, en la cúspide de la senilidad, con mente y cuerpo atrofiados, era un caso de trato indigno, de pisoteo a los Derechos Humanos, ahí estaba estamomia, afásica, con una mano inútil, humedeciendo con su baba de Gerber las hojas membretadas del discurso que tenía que cortar a medias, porque a esa edad era ya clínicamente imposible pronunciar lo...