Ensayos

LA MIRADA DEL LOBO
Sasha Miles
Sinopsis:

Cuando lo pierdes todo y parece que solo te queda la
resignación,
el amor llega y se convierte en la auténtica salvación.
Diana no había tenido suerte en el amor, pero sabía
que no debía cerrarse a nuevas oportunidades; por eso,
cuando aquel guapo desconocido entró en su vida
proponiéndole tres noches de fantasía, no dudó en
aceptarlo. Y, depronto se encontró entre dos fuegos
intensos: el de la pasión y el de aquel amor que podría
convertirse en su perdición.
Daniel estaba acostumbrado a ir de una mujer a otra:
una sola noche, un pacto entre ambos, toneladas
infinitas de placer… pero siete años atrás su vida había
dado un giro de ciento ochenta grados, cuando una
maldita mujer de ojos verdes lo condenó a vagar una
eternidaden forma de lobo.

Solo las noches de luna llena podrá ser hombre otra
vez para encontrarse con ella: su compañera, la única
que podrá poner fin a su maldición.
¿Podrá una simple mujer enamorarse del lobo y
liberar al hombre de su triste condena?

La mirada del lobo
© 1ª edición mayo 2014
© Sasha Miles
Portada: © Fotolia
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Obra Registrada

A mi lobo,
mi mayor inspiración.

ÍNDICE
PRÓLOGO
CAPÍTULO 1
CAPÍTULO 2
CAPÍTULO 3
CAPÍTULO 4
CAPÍTULO 5
CAPÍTULO 6
CAPÍTULO 7
CAPÍTULO 8
CAPÍTULO 9CAPÍTULO 10
CAPÍTULO 11
CAPÍTULO 12
CAPÍTULO 13
CAPÍTULO 14
CAPÍTULO 15
CAPÍTULO 16
CAPÍTULO 17
CAPÍTULO 18
CAPÍTULO 19
CAPÍTULO 20
CAPÍTULO 21
CAPÍTULO 22
CAPÍTULO 23
CAPÍTULO 24
CAPÍTULO 25
CAPÍTULO 26
CAPÍTULO 27
CAPÍTULO 28
CAPÍTULO 29
CAPÍTULO 30
CAPÍTULO 31

CAPÍTULO 32
CAPÍTULO 33
CAPÍTULO 34
EPÍLOGO

PRÓLOGO
—Demos un fuerte aplauso a nuestro nuevo directorgeneral, Daniel
Rosales.
El mayor accionista de Telecomunicaciones Milenio se dirigió al hombre
al que acababa de nombrar con el brazo extendido, una mirada orgullosa y
toneladas de satisfacción.
Daniel se levantó de su asiento con la seguridad que le caracterizaba, se
colocó de forma pulcra la chaqueta, se abrochó el botón y trató de
mostrarse humilde, aunque no lo consiguió. Era demasiadohombre,
demasiado capaz, duro e inteligente. Un conquistador nato, tanto en los
negocios como con las mujeres. Sabía lo que quería; lo señalaba, apuntaba
y siempre lo obtenía.
Caminó hacia el estrado sin romper el contacto visual con su superior.
Mantuvo esa sonrisa profesional, que había tardado años en perfeccionar,
aquella, cuyos brillantes y blancos dientes trabajaban para resaltar aúnmás
su bello rostro masculino, tan hermoso como el de la famosa estatua de
Miguel Ángel; el David a su lado era un hombre del montón. Su cuerpo
duro pero a la vez estilizado, su pelo tan claro que era casi blanco y sus
ojos grises, así como su elegante y letal porte unido a su gran inteligencia,
le proporcionaban todo lo que necesitaba. Y daban una visión al mundo
sobre él, que muchos quisieranpara sí.
Se irguió con orgullo y apretó la mano de su maestro, aquel que lo había
guiado hasta lo más alto. Sabía que sin él se habría quedado por el camino.
Tenía mucho que agradecer al hombre que había visto en aquel pobre
huérfano el talento y la gloria, además del esfuerzo empleado en enseñarle
y hacerle comprender el único mandamiento que debía regir su vida si
pretendía prosperar enaquel lugar. Máxima que no había perdido de vista
ni un solo día, que se repetía una y otra vez cuando algún obstáculo se
interponía en la ardua lucha por lograr sus objetivos:
Siempre hay un pez más grande, solo se puede ganar siendo un tiburón.
Y no había otro como él en toda la ciudad.
Saludó a su público, hizo un chiste meditado y cuidadosamente
planeado, alguna alusión a su jefe, que...