Entereza
Igualmente, no eran estas las maravillas querealmente llamaban la atención dentro del verde y singular bosque. Era el poderoso y gigante golem de escarcha que merodeaba, el verdadero origen de la maravilla. Creado desde tiempos desconocidos a partirde un glaciar en deshielo, el defensor arcano recorre la espesura verde protegiendo la enorme variedad de fuerzas desconocidas que, a manos de un mortal corrupto o ignorante, podrían traer caos ydestrucción a la civilización creando amenazas inimaginables.
El clima en ese bosque era cálido, húmedo, sofocante, y en las regiones en donde predominaban los poderes de fuego, pequeñas erupciones delava ardiente podían encontrarse rodeando los campos de fuerzas arcanos de los templos de dichos elementos. Era el lugar más inoportuno para cualquier ser vivo hecho de hielo. Inclusive el golem.Con frecuencia, el titán de escarcha descargaba su ira contra el bosque mismo, golpeaba a los campos de fuerza, gritaba y se desprendía partes de sí mismo formando nevadas interminables y fríosrepentinos. El clima y la responsabilidad de proteger algo que inclusive él mismo desconocía, lo volvía loco. Era el sentir que se encontraba en el lugar equivocado sin poder salir, lo que desataba su irainterminable.
Enormes expediciones de guerreros, magos, cazadores y hasta sacerdotes intentaron acabar con él para que detener la destrucción en territorio mágico sagrado. La raza humana quepredominaba en esa zona creía que esa era la única solución, sin pensar que la bestia mitológica era abierta al razonamiento, al debate pacífico. La bestia pensaba, sentía, y quién sabe si poseía más rasgos...
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