ENTRE LO PROPIO Y LO AJENO

ENTRE LO PROPIO Y LO AJENO.


Por: Mary Luz Gómez Gómez C.C. 43.473.681

“En Flandes, en 1547, Teofrastus me lo explicó todo: nos dieron la diversidad del mundo- me dijo- pero nosotros sólo queremos oro. Tú encontraste un tesoro en la selva infinita y sentiste decepción porque querías que la selva de mil colores tuviera una sola apariencia”
William Ospina (El país de la canela, 2008)Quizás en los albores del siglo XIX todavía con los intentos de formación de la república se debatía en los grandes salones de la capital, la inclusión de determinadas personas, porque llenos de los prejuicios de los españoles en la época de la conquista y la colonia, nos habíamos hecho herederos de una práctica de exclusión y marginación, así pues, rechazamos todo aquello que había sido nuestroy tratábamos por el camino que fuese de parecer a la Europa blanca que había llegado con la cruz y la espada a conquistar, masacrar y ultrajar incluso con la bendición papal, pero mientras en la Europa del siglo XIX florecía un desbordado interés por las riquezas americanas; en las tierras lejos de los palacios se reflejaba cada vez más en la simpleza de las villas y ciudades reales el intentopor organizar una sociedad pluriétnica, multicultural y diversa que pretendía no reconocerse a sí misma y por el contrario quería homologarse como hijos de una Europa blanca, refinada y católica que ni siquiera los reconocía.

Así pues de una manera muy amena lo ilustra el cuento de Juan de Dios Restrepo (Emiko Kastos 1827-1896) titulado “una botella de brandy y otra de ginebra” lasdiscrepancias sociales en el siglo XIX en la sociedad santafereña que en la vida de Telésforo Cascajón y Sofía se veían reflejadas, ya que el protagonista de nuestra historia había logrado algo de fortuna con la herencia de su padre y como producto de las constantes revoluciones, donde había sabido aprovechar y sacar ventaja, apoyando en su momento al bando correcto, de esta manera Telesforo viene asignificar el portador a distancia, el mensajero que trae la noticia de aquel sueño de ser los americanos descendientes reconocidos de la Europa real, no era posible, por más intentos que se hiciera, la naturaleza salvaje y enigmática, el arraigamiento con la tierra, con los animales y el campo, era algo que rivalizaba con los grandes y suntuosos palacios europeos, donde más interesaba el oro que llegabapara adornar y combatir en guerras, que para reconocer las gentes de la cual procedía. Un siglo XIX que en lo que llamamos Colombia se convertía en un caldo de cultivo y experimentos de la república, donde fueron los intereses de unos cuantos los que prevalecieron sobre los demás. Allí la familia de Teosforo Cascajón estaba situado y sin embargo, no era un hombre de sociedad, de burguesía oabolengos, era más bien algo ermitaño si se quiere retomar la expresión, y por eso mismo, al llegar donde su amigo solicita a pesar de ser la diez de la mañana que le dé un trago, a lo cual el amigo accede y le brinda un botella de brandy y otra de ginebra, quizás porque ambos licores representan el intento de parecer en muchas cosas a los europeos y uno de ellos, era en sus bebidas, así se despreciabala chicha indígena o el aguardiente destilado por manos de los negros hacia todo tipo de bebidas más finas y menos relacionadas con el pueblo o la gentuza. Así este Teosforo será el prototipo del hombre habiendo alcanzado fortuna considerable buscaba la estabilidad del matrimonio con una mujer según los requerimientos de su madre, de una familia que reflejara su posición social, era el tiempo deuna sociedad que despreciando lo propio, se arrodillaba ante lo extranjero y lo foráneo, era más importante parecer de la corte que ser una mujer de hogar y de campo, puesto era considerado como salvaje y primitivo, allí recaía el pensamiento del siglo XIX respecto a la mujer que bien diferenciaba las clases sociales imperantes, al respecto señala Londoño (1995) en su artículo “las colombianas...