Entrevista Jorge Altamira


Hincha de Huracán por su papá y su tío, Jorge Altamira expone su conocimiento sobre el deporte detrás de una bandera socialista. El representante del Partido Obrero habla sobre el equipo del 73, el negocio del fútbol, el papel del Estado, el dinero que reciben los clubes y los intermediarios.

Jorge Altamira asistió por primera vez al Palacio Tomás Ducó en un partido contra Tigre, en abrilde 1948. Aunque la amenaza de su tío lo terminó de convencer, piensa que él terminó de transmitirle todo el amor por el Globo a su padre: “Yo lo hice hincha de Huracán porque mi viejo seguía al club que le gustaba en distintos períodos. Pero no podía traicionar a un pibe de 6 años, así que no le quedó otra. Y ese fue el resultado de toda una familia hincha de Huracán”.

El hecho de que seantodos de Huracán, ¿alimenta el fanatismo?

Sí, porque cuando sos hincha de un equipo, en este caso Huracán, de una edad tan tierna es un problema que vos no manejás. Yo lo vine a ver con Olimpo y estaba tan nervioso como cuando entré en la primaria. Estaba tenso. Además, hay algo que también influye, siendo un equipo con tantos altibajos vos tenías que defender el lunes a Huracán en la escuela.Este año se cumplieron 40 años de Huracán del 73, y por lo que tengo entendido, el día de la consagración estaba en una movilización por el Golpe de Estado que destituyó al presidente electo Salvador Allende…

Sí, estábamos a tres cuadras porque nosotros concentrábamos en Congreso. De ahí, íbamos a ir todo por Callao, Avenida Libertador y ahí está la embajada de Chile. Ahora, también quería ira la de Huracán y mientras, la manifestación salía. Quería meterme en las dos. Y en un momento determinado, a la altura de Alsina y Entre Ríos, veo que viene la gente de Huracán mientras pensaba: “Puta, por fin salimos campeones y yo no puedo estar acá”. Pero lo de Allende fue muy grave…

La política pudo más…

No, para nada. Si hubiera sido un acto, les digo a mis compañeros discúlpenme y mevoy. Pero el Golpe de Pinochet fue sangriento, destruyó libertades, personas y militantes. Si me decís que está programado un acto del Partido Obrero. Y bueno, lo hará otro; yo me voy a ver a Huracán. Tuve la oportunidad de festejar y no pude hacerlo.

¿Qué recuerdos tiene de ese año?

Íbamos a todos los partidos como en el 2009. Se disfrutaba mucho porque el objetivo de ese equipo era tenerla posesión de la pelota y en base a eso, atacar. Hasta el día de hoy sostengo que ni Messi, ni Maradona. El mejor jugador de fútbol argentino fue Houseman. Yo le vi hacer cosas a Houseman que Messi no las hace. Era una cosa de locos. Pero a Houseman alguien lo tendría que haber respaldado del punto de vista psicológico, necesitaba contención.

¿Cree que hay puntos de encuentro entre lapolítica de un club y la política de un país?

Y sí, no sé si de un club. Te das cuenta que nuestro fútbol está en la lona y ves que el país también va a los tumbos. Entonces, si hay una conexión. Hay que hacer un cambio extremadamente profundo. Entre otras cosas porque el fútbol, en un país que lo practica con tanta intensidad e involucra tanta gente, refleja al país. Es una escena donde vos tenés alos principales protagonistas. El pueblo que vota, que va a las manifestaciones está ahí: en la cancha. Eso se siente.

¿Qué opina sobre lo que el Gobierno de la Ciudad intentó hacer con la Quemita o con el predio de Ferro?

Creo que es lo mismo del Borda. No hay una preocupación porque la ciudad se desenvuelva en términos sociales. Los predios son sociales porque la gente practica un deporte.Ellos desplazan al club para liberar los terrenos porque quieren hacer negocios inmobiliarios. Por lo tanto, cuando Huracán o Ferro salieron con los tapones de punta a defender el predio, defendía algo más que un club. Defender el derecho a usar el espacio recreativo de la ciudad me parece sumamente importante. Pero tendría que haber una cruzada de todos los clubes. No solo los de fútbol, sino...