Entrevista Norberg Vargas Llosa _Neo 2006_ Traduce Emil 1
“La idea de que el liberalismo en América Latina ha muerto es una
exageración”
Entrevista: Johan Norberg
Ilustración: Joanna Andreasson
Traducción al español: Emilio Quintana
www.emilioquintana.com
Neo Magasinet (Estocolmo, Nr 4, 2006, pp. 56-59)
http://magasinetneo.se/issue/nr-4-2006
Esta traducción al español se publica con una licencia Creative CommonsAttributionNonCommercial-NoDerivs 3.0: http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/3.0/es/deed.en
En esta entrevista el escritor peruano Mario Vargas Llosa, uno de los intelectuales más
importantes de nuestro tiempo, nos explica por qué sigue creyendo en América Latina y por
qué su esperanza radica en la mediocridad de los políticos.
1
Justo cuando está a punto de explicar lo que realmente piensa sobre Lula daSilva, el
presidente de Brasil, Mario Vargas Llosa hace un alto y me pregunta que si se puede quitar la
chaqueta. Es la primera vez que entrevisto a una persona que piensa que está en la
obligación de pedir permiso para quitarse la chaqueta, y nunca lo hubiera esperado de uno
de los más importantes intelectuales de América Latina, alguien cuyo nombre, gracias a la
alta calidad de su obra narrativa,está siempre presente en los debates que preceden a la
concesión del Premio Nobel de Literatura.
Vargas Llosa no es solamente un gentleman latino partidario de cultivar los rituales de la
cortesía, ni tampoco el hombre humilde de 70 años que usted está a punto de conocer. Es
también una persona que se ha interesado en el estudio de las ideas y las teorías,
manifestando su disgusto por las utopíasy los fundamentalismos tanto en política como en
religión. En el principio, tuvo que enfrentarse a su propio marxismo, cuando Fidel Castro
impuso a los cubanos los campos de concentración y encarceló en ellos a los homosexuales.
El comunismo no trajo consigo la liberación que Vargas Llosa esperaba. Mientras que otros
marxistas se dedicaban a intentar buscar justificaciones, Vargas Llosa se tomóel asunto en
serio y decidió renunciar a sus ideas. Poco a poco llegó a la conclusión de que solo a través
de la apertura, tanto política como económica, se pueden destruir los privilegios y las
jerarquías sociales y étnicas que tan a menudo quedan reflejadas en sus novelas. Fue así
como se convirtió en liberal.
Vargas Llosa peina canas. Ha tenido tiempo bastante como para ser testigo tanto de lalucha
por la libertad como de los abusos del poder, ha concebido esperanzas y ha sufrido
decepciones, y ha escrito algunas de las más hermosas representaciones literarias sobre
estos temas. Un asunto que aparece recurrentemente en toda su obra es el de la capacidad
del poder para corromper y pervertir los ideales. “Ni siquiera el liberalismo es inmune”,
afirma. De hecho, uno de los problemas másimportantes de la década de los 90 en América
Latina es la forma en que se hicieron las reformas conducentes a la privatización y el libre
comercio, que, como explica, se vieron pervertidas por el tradicional entramado de los
privilegios sociales imperantes:
- Tome, por ejemplo, lo que hizo Carlos Menem en Argentina. Los monopolios estatales se
convirtieron en monopolios privados administrados porsus amigos, de modo que en
realidad no cambió nada. Los liberales estamos a favor de la privatización, pero con la
condición de que haya libre competencia para que mejoren los servicios y se reduzcan los
costes. Esto nunca llegó a hacerse, ya que se conservaron los monopolios y lo único que
cambió fueron los propietarios de los mismos. Básicamente se trató de un ataque contra los
principios de laprivatización, pero como todo esto se hizo con el sello de “liberal” se ha
creado una gran confusión sobre lo que de verdad representa el liberalismo.
Vargas Llosa ha experimentado el problema personalmente. En 1990 fue candidato a la
presidencia del Perú como líder de una plataforma liberal que llevaba en su programa, entre
otras propuestas, el impulso a la privatización, el libre comercio y la...
Regístrate para leer el documento completo.